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Huatulco, Oax., 06 de abril 2011 (Quadratín).- El Fondo Nacional para el Fomento de las Artesanías (Fonart), ante la falta de una normatividad que garantice la protección del patrimonio cultural material e inmaterial que guardan las técnicas artesanales tradicionales, se pronunció hoy por lograr acuerdos que permitan que el Gobierno Federal instrumente la protección jurídica de esta herencia que nos identifica como nación.
En apego a nuestra Constitución y a los acuerdos y convenios internacionales que México tiene firmados, si se pretende proteger a través de Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) y la ley de la materia, las técnicas artesanales tradicionales, tendrá que ser reconociendo que las comunidades, en especial las indígenas, los grupos y en algunos casos los individuos, desempeñan un importante papel en la producción, en la salvaguardia, en el mantenimiento y la creación del patrimonio cultural inmaterial, contribuyendo con ello a enriquecer la creatividad humana.
Así se expresó Rafaela Luft Dávalos, directora general del Fonart, al participar en el Segundo Encuentro Nacional de Denominaciones de Origen, evento que organiza el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), el gobierno del Estado de Oaxaca y la Delegación de la Unión Europea en México (DUE), y cuyo objetivo central es continuar con la vinculación de los representantes de las Denominaciones de Origen con los diversos organismos gubernamentales competentes para otorgar estímulos para la gestión y promoción de sus actividades, para llegar a acuerdos que permitan posicionar a las Denominaciones de Origen Mexicanas en los mercados mundiales. Durante su exposición Luft Dávalos sostuvo que desde la visión del Fonart y en virtud de ser una figura jurídica cuya titularidad recae en el Estado Mexicano, se debe generar una política pública que posicione a la Denominación de Origen como un producto de máxima calidad, con características únicas y que forman parte de una tradición e historia de una región.
También estimó que las Denominaciones de Origen deben de ubicarse dentro de una estrategia de desarrollo multidimensional de largo plazo con un plan integral de negocios donde figuren instituciones de turismo, cultura, economía, salud y actores sociales y privados, además de que se les debe de vincular con la investigación y la academia.
Precisó que uno de los factores determinantes que hacen que la protección de una Denominación de Origen sea de gran importancia, es que indica o identifica el origen geográfico así como las características naturales y los factores humanos que intervienen en el producto, otorgándole al mismo cualidades propias que lo hacen único y distintivo.
La titular del Fonart expuso asimismo que las denominaciones de origen contribuyen a la competitividad de las empresas, ya que son una excelente herramienta de promoción y relaciones públicas para la conformación y consolidación de las llamadas marcas país.
Dijo que no sólo proporcionan un marco legal de defensa y protección del producto contra los imitadores, sino que garantizan al consumidor la identidad y calidad del producto y, al mismo tiempo, elevan la rentabilidad de los bienes que los productores ofrecen.
Es por ello que este encuentro, que concluye hoy, busca promover y facilitar el impulso de las Denominaciones de Origen en México, particularmente en el ámbito de la Propiedad Industrial, ya que ésta es un factor clave en la protección del uso no autorizado de las denominaciones de origen con el fin de impedir la competencia desleal en el mercado, el fraude o engaño a los consumidores y evitar que la denominación de origen se convierta en una designación genérica.
En este contexto, Rafaela Luft consideró indispensable reconocer también en una ley secundaria y específica para los artesanos y su calidad, de conformidad con lo que establece nuestra constitución.
De igual forma, resaltó, será necesario, para generar la figura jurídica idónea que proteja la propiedad industrial con valor patrimonial cultural material e inmaterial, la revisión de todos y cada uno de los instrumentos legales existentes que beneficien estas acciones.
Explicó que en México existen distintos ordenamientos jurídicos que obligan al Estado, a través de sus instituciones, a proteger y fomentar su patrimonio cultural material e inmaterial.
Desde la trinchera del sector artesanal, a través del Fonart, a falta de figuras jurídicas idóneas en nuestra legislación secundaria, para la protección comercial y de salvaguardia del patrimonio cultural inmaterial de las técnicas artesanales tradicionales, se ha buscado sacar provecho de estas figuras jurídicas.
Este Encuentro Nacional de Denominaciones de Origen representa la oportunidad para que los titulares de las Denominaciones de Origen compartan experiencias, retos y perspectivas sectoriales y establezcan una mecánica de trabajo con las autoridades federales para emplear eficientemente el sistema de propiedad industrial en beneficio de los usuarios autorizados.