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Oaxaca, Oax. 19 de julio de 2010 (Quadratín).- Sin contratiempos y por partida doble, se realizó este lunes la Guelaguetza, máxima expresión de folclor en Oaxaca, mientras que en el Zócalo de la ciudad se suscitó un zafarrancho entre comerciantes y appistas que dejó ocho detenidos y dos lesionados.
Ulises Ruiz Ortiz presidió la Guelaguetza, matutina y vespertina, en el estadio de futbol Benito Juárez, que se acondicionó como sede alterna luego del retraso en la obra de techado del auditorio Guelaguetza, en el Cerro del Fortín. En esta ocasión, sus invitados especiales fueron el presidente del PRI, Eviel Pérez Magaña y otros políticos priistas.
De acuerdo con la Secretaría de Turismo, en cada edición se tuvo un aproximado de 12 mil espectadores, que estuvieron resguardados por más de dos mil elementos de seguridad pública desplegados únicamente para preservar la tranquilidad del evento cultural más importante del estado.
Por su parte, la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), realizó su Guelaguetza en el campo deportivo del Instituto Tecnológico de Oaxaca (ITO), la cual presidió Azael Santiago Chepi.
El dirigente magisterial aseguró que a diferencia de la oficial, esta presentación conservó la autenticidad de los bailes y anticipó que esta continuará, aún cuando Ulises Ruiz ya no esté en el gobierno, pues la Guelaguetza alternativa inició después del conflicto de 2006, cuando la gremial rompió relaciones con el gobierno.
En el presente sexenio, la Guelaguetza se suspendió en una ocasión, y en este 2010, fue en una sede alterna. Ambas festividades transcurrieron sin contratiempo, sin embargo, en el Zócalo de la ciudad, un zafarrancho entre comerciantes semifijos y policías estatales dejó como saldo ocho detenidos y dos heridos.
Los vendedores, afines a la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), intentaron oponer resistencia al desalojo, lo que sobrevino en un connato de bronca. De acuerdo con Jorge Alberto Quezada, comisionado de la Policía estatal, el retiro de los ambulantes fue a petición del Ayuntamiento, por no contar con la licencia para expender sus productos.
En un segundo momento de este enfrentamiento, presuntos appistas arremetieron contra los establecimientos ubicados en uno de los portales, principalmente del restaurante propiedad de la familia Rodríguez Casasnovas, a la que pertenece la ex secretaria de Turismo y ex candidata del PRI a la presidencia municipal, Beatriz Rodríguez.
El hecho provocó que turistas de diversas nacionalidades salieran del lugar y buscaran donde resguardarse mientras pasaba la gresca, que contuvo la policía con algunas detenciones. Pese a ello, la Secretaría de Seguridad Pública informó que el saldo de las festividades fue blanco.
En sendas entrevistas, el gobernador Ulises Ruiz declinó hablar del zafarrancho en el Zócalo y en cambio sí defendió a su administración, asegurando que entregará cuentas claras, en respuesta a los opositores que aducen retraso en el trámite de entrega-recepción porque la casa está sucia.
Por la festividad de la Guelaguetza organizada por el gobierno estatal se calcula una derrama económica de 234 millones de pesos y una ocupación hotelera que supere el 85 por ciento.