La Constitución de 1854 y la crisis de México
La urgencia de muchos seguidores que votaron por el cambio, para que se cumplan las promesas de campaña no tiene razón de ser
CIUDAD DE MÉXICO, 18 de diciembre de 2018.- La elemental lógica le sirve a uno para entender la actitud de los partidos que perdieron el primero de julio, de sus seguidores, de los mercenarios, de los francotiradores, de los perdedores del chayote y de algunas personas ingenuas o de buena voluntad que estaban contentas con los regímenes pasados.
Pero no puede entender y quizá es más censurable por venir de quienes viene, el apresuramiento, lo acelerado de las demandas, la embestida contra la pared, la espada cayendo sobre la cabeza del nuevo gobierno departe de algunos que votaron por él y ya exigen resultados concretos.
Las diatribas de los primeros estuvieron presentes el largo período de interregno para ir deshilvanando las propuestas que se hacían y los programas próximos a oficializarse y cualquiera que sea la situación van a seguir.
La urgencia de muchos seguidores que votaron por el cambio, para que se cumplan las promesas de campaña no tiene razón de ser y se viene haciendo desde el primero de diciembre.
Hay quienes ya le ponen sentencia a un incumplimiento: inseguridad por ejemplo si no se da suficiente presupuesto para cultura. Hay rezongo y respingue por todo con actitudes de rompimiento y señalamiento de enemigos como si la campaña de depredación que viene del bando contrario fuera más efectiva y estuviera surtiendo efecto ¡en unos cuantos días!. Poca estabilidad, poca inteligencia e irresponsable actitud están mostrando los que así se expresan.
MILLONES ESPERAN CAMBIOS Y CENSURAN A LOS ACELERADOS
De una manera distinta, con observaciones, datos y contenidos se están cuestionando algunos aspectos de la propuesta del gobierno a la nueva reforma educativa, a la disminución de presupuesto a las universidades y desde luego al enfoque sobre seguridad.
Los últimos meses de afiebradas acciones, algunas ya oficiales con la nueva presidencia, van marcando el ritmo del actual régimen. Se acercan grupos de campesinos, obreros y otros sectores y los maestros reconocen la caída de la reforma educativa de Peña y se asumen por igual SNTE y CNTE -un mismo sindicato-, que fueron las artífices del cambio.
No se conoce a fondo la nueva propuesta de reforma educativa ni los efectos que se esperan. Hay críticas al aumento presupuestal a los militares y se acentúa el rechazo a la Guardia Nacional. Pero por otra parte se hace un buen aumento al presupuesto de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social para enfrentar entre otros problemas la situación del ejército de reserva, llamados ninis por algunos, que según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) sería de 7 millones en México. Las cosas se van ajustando; no son perfectas, pero ahí van.
LOS ÁNGELES CAÍDOS Y SU PARAÍSO PERDIDO
La exacerbación de las críticas -el PAN haciendo el ridículo, el PRI dando lecciones de moral-, va delineando en pequeño el arquetipo universal delos que fueron echados del paraíso. El odio y la venganza se centra es desarticular el proyecto, echarlo a perder y exhibir a los que lo apoyan o sumarlos. Ya ciego, en sus últimos años, John Milton, el gran poeta y ensayista inglés, terminó de escribir su poema épico de 12 libros y más de 10 mil versos, El paraíso perdido (Amazon, muchas editoriales y ediciones), acerca de como el bello Lucifer, convertido en el temible Satanás trata de destruir la creación de dios, seduciendo a Eva en elEdén y echando por la borda el proyecto del que se asumía creador del universo con la expulsión de la mujer y su pareja, Adán.Aparte, habían caído el propio Lucifer, Belcebú, Moloch, Chemosh, Astiret, Mammon, Bekial y otros malandrines.
Poema clásico que fue muy controvertido en su época por los conservadores que tenían como guía la biblia y negaban el valor del poema porque lo consideraban profano, tuvo en cambio la defensa de grandes poetas y escritores sobre todo en Alemania que lo reconocieron y sirvió como arquetipo universal del que, por envidia y celos, quiere destruir el proyecto que otros han creado. Milton no solo fue un gran poeta y creador de nuevas formas diversificación, sino que como político fue primer ministro del gobierno de Oliver Cromwell y defensor de la unidad de Inglaterra. Murió en 1674 y este mes hubiera cumplido 410 años.