Bloquean vecinos de la Gómez Sandoval por obra inconclusa
OAXACA, Oax., 20 de mayo de 2021.- El reportero de Quadratín Oaxaca, Luis Jerónimo, sufrió una agresión por parte de un grupo de rijosos mientras realizaba la cobertura de una marcha en la ciudad de Oaxaca.
El reportero cubría la afectación cuando un grupo armado con palos que iba de manera separada al contingente que realizaba la marcha, lo amedrentó y trató de despojarlo de su equipo.
El grupo de presión logró quitarle un teléfono celular, mismo que aventaron al suelo, amenazándolo con dañar el equipo.
Esta es la segunda agresión en menos de un mes ocurrida contra reporteros en Oaxaca por parte de grupos de presión, ya que a finales de abril el reportero Tomás Martínez sufrió una agresión mientras realizaba una cobertura en Xoxocotlán.
Los grupos de presión han hecho de la protesta y la violencia una forma de vida en Oaxaca, y durante las marchas realizan actos vandálicos y de agresión contra los trabajadores de la prensa.
La UTE, el vocero de la S-22 y Salomón Jara, detrás del vandalismo y violencia extrema de pseudonormalistas
Con el pretexto de protestar por “la represión” de estudiantes normalistas en Chiapas, un grupo de pseudonormalistas en Oaxaca marchó este jueves, realizando actos vandálicos a su paso en comercios, gasolineras, casas, bancos, agencias automotrices, restaurantes y tiendas minoristas, entre otros, donde realizaron destrozos, robaron dinero y diversos objetos, además de nuevamente golpear a reporteros de medios de comunicación.
El grupo de choque que realizó actos de violencia y provocación extrema, es el mismo que semanas anteriores fue señalado al servicio de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), un grupo radical del magisterio que encabeza Rogelio Vargas Garfias; así como del vocero de la Sección 22, Wilbert Santiago Valdivieso y del senador Salomón Jara, mediante su organización FUCO.
El “argumento” para la violencia que ejerció hoy este grupo contra personas, comercios y periodistas, fue la detención hace dos días de jóvenes presuntamente estudiantes de la normal rural Mactumactzá, de Chiapas.
La policía chiapaneca detuvo 95 personas, 74 mujeres y 21 hombres, dos menores de edad, acusados de motín, pandillerismo, robo con violencia, daños y ataques a las vías de comunicación.
La Fiscalía de Chiapas informó que se decomisaron artefactos explosivos, más de mil cohetones, cerca de 200 bombas molotov, 87 granadas hechizas, dos tanques de gas y un arma blanca. Ayer los padres de los detenidos y normalistas marcharon diciendo que, a pesar de todo lo que hicieron, “no son delincuentes”.