Diferencias entre un estúpido y un idiota
CIUDAD DE MÉXICO, 13 de marzo de 2018.- Los que saben aseguran que la candidatura de Ricardo Anaya Cortés a la silla grande, está en el aire, pues no solamente tiene tras de sus huesos a la PGR, que anda buscando cuadrarle la denuncia por lavado de dinero y evasión fiscal, sino que también se le han empezado a caer los apoyos de algunos panistas y muchos perredistas, que no lo ven como una buena opción para enfrentar, sobre todo, a Andrés Manuel López Obrador. Y para colmo de males, también Miguel Ángel Mancera, anda queriendo retirarle su apoyo y hasta quiere rechazar la candidatura plurinominal al Senado, que todo mundo supone que negocio, para mantenerse en el Frente** Por lo menos ayer el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Angel Mancera Espinosa, anunció que sino hay un compro miso formal para integrar un gobierno de coalición, en caso de que el frente gane las elecciones, se va a quedar en su encargo de Jefe de Gobierno. Hasta cumplir con su mandato constitucional. Es que, alega Mancera Espinosa, que no ha visto señales claras de que Anaya pretenda conformar un gobierno de coalición, que no solamente vea por una casta política, sino que incluya a todos los mexicanos y desde luego, tanto a panista como perredistas y de Movimiento Ciudadano, en la transformación del sistema de gobierno. Es decir, Mancera ve que solo persiguen el poder por el poder, o sea más de lo mismo. Miguel Angel Mancera anunció que si esta semana no dan señales de que quieren gobierno de coalición, dejará el frente y se dedicara de lleno a gobernar la ciudad de México, como se lo mandataron los capitalinos en 2012* Lo cierto es que Ricardo Anaya tiene que vencer muchas inercias en esta semana, primero aclarar su diferendo con la PGR y enseguida convocar a la firma de una carta compromiso para integrar un gobierno de coalición, pues no basta con repartirles diputaciones y senadurías, así como candidaturas alcaldías, para los perredistas, sino que tiene que competerse por escrito a que después del 1 de julio seguirá unido, trabajando por México, con perredistas y las huestes del MC. Vamos a ver, pero las apuestas están en contra del joven maravilla* Por cierto, Andrés Manuel López Obrador volvió a alborotar la gallera con la amenaza que lanzó ante los banqueros, a los que dijo que, si no gana el 1 de julio, se irá a su rancho, La Chingada, y dejara suelto al tigre, y a ver quién lo amarra. Eso que parece música celestial para sus seguidores, es interpretado por los que no creen que su cambio sea real y verdadero, como la voz de alerta para lo que se avecina. Digo, porque si casi el 70 por ciento de los mexicanos con posibilidades de votar el 1 de julio, no están con AMLO, lo más probable es que vuelva a fracasar en su tercer intento por llegar a Palacio Nacional. La verdad, es que el Peje dejo sumamente preocupados a los banqueros y a otros sectores de prósperos empresarios que manejan millones de pesos en la economía, pues además les dejo claro que trabajara con ellos, pero como buen populista, para él la prioridad son los pobres** Y parece que ahora si el pleno de la Cámara de Diputados le entrará al análisis de la terna que propuso la Comisión de Vigilancia de la Auditoria Superior de la Federación, para elegir al Auditor. El encargado de hacer la propuesta ante el pleno será el diputado Luis Maldonado Venegas, quien preside la citada Comisión de Vigilancia, pero lo que no sabe todavía es si ya fue aprobada por panistas y perredistas la terna que tantos trabajos pasaron para integrar en los últimos meses del año pasado.