Matan en La Ventosa a Elena, vendedora de comida
OAXACA, Oax. 1 de noviembre de 2022.- En Oaxaca, la noche del 31 de octubre es para velar en los panteones.
La creencia es que esperan así a las almas de sus seres queridos, las almas de quienes ya no están físicamente con nosotros.
Es un momento de fiesta. Las tumbas se adornan con flores de cempasúchil y con velas, muchas velas, que son la luz que recibirá a esos seres espirituales que convivirán durante dos días con los vivos.
Es un espacio para la convivencia. Las familias llevan comida, música, es un lugar de encuentro y de reunión.
Algunos prefieren llevar lo que al difunto le gustaba, en vida, y pasan la noche.
En Xoxocotlán y Atzompa, los dos espacios más tradicionales de Oaxaca en el Valle Central, la noche del panteón transcurrió sin incidentes.
En ambos panteones hubo seguridad como parte del operativo para resguardar a las personas, que después de dos años de pandemia, pudieron cumplir con esta tradición.
Así se recibe a las almas de los difuntos en Oaxaca. El culto a las ánimas es devoción pero también fiesta, combinan ambas para que reditúe también en beneficio económico, pues llegan turistas para vivir esta celebración.