Celebra Abigail Mendoza 30 años del restaurante Tlamanalli

OAXACA, Oax. 15 de febrero de 2020.- En el corazón de Teotitlán del Valle, hace 30 años nació un sueño de esos que no se imaginan, pero suceden.

Abigail Mendoza es actualmente una de las mujeres más admiradas en el mundo gastronómico, conquistándoles con el paladar y con su generosa sonrisa.

Junto con sus hermanos han tejido para Oaxaca un tapete que ha llevado el sabor original de los platillos a los sitios más exclusivos.

En el íconico municipio de Teotitlán del Valle reconocido a nivel internacional por los hermosos tapetes que se tejen de manera tradicional, y en donde casi todos hablan el zapoteco, Abigaíl Mendoza fue la primera mujer de 10 hermanos, su padre un tejedor y campesino, su madre una noble mujer que ayudaba en la labores del campo y principalmente a criar a sus hijos.

Hasta su restaurante Tlamanalli llegó la estrella de la cocina y presentador de televisión estadunidense, Anthony Bourdain, quien quedó admirado por la forma mística y artesanal de preparar los platillos de Abigaíl.

Tlamalli es como hacer un viaje ancestral a una cocina del México profundo. En 1993, una reportera de The New York Times consideró a este restaurante como unos de los diez mejores del mundo.

Durante la celebración de los 30 años, asistieron reconocidas personalidades del sector empresarial, gastronómico, cultural y político, como el ex gobernador de Oaxaca, Diódoro Carrasco Altamirano, don Alfredo Harp Helú, la presidenta de la Fundación Alfredo Harp Helú Oaxaca (FAHHO), Isabel Grañén Porrúa.

Así como la reconocida cocinera tradicional y dueña del famoso restaurante Las Quince Letras, Celia Florian y la presidenta de la Asociación Femenil de Ejecutivas de Empresas Turísticas (AFEET) Oaxaca, Estela Nolasco.

En tanto en su cuenta de Twitter la presidenta de la FAHHO hizo un reconocimiento al trabajo honesto e incansable para difundir y enaltecer la comida zapoteca de Oaxaca.

Por su parte el ex gobernador de Oaxaca, Diódoro Carrasco Altamirano, escribió que era un gusto disfrutar de la hospitalidad y sabiduría gastronómica de Abigail Mendoza.