
Obras inconclusas, ineficiencia y omisiones en Oaxaca de Juárez: Chagoya
OAXACA, Oax. 17 de agosto de 2020.- De los diputados locales de Oaxaca que aprobaron la reciente reforma a la Ley de los derechos de los niñas, niños y adolescentes que prohíbe la venta, regalo o suministro de bebidas y alimentos con alto contenido calórico, por lo menos el 50% de ellos padece problemas de sobrepeso.
Incluso, la diputada de Morena que impulsó la polémica iniciativa, Magaly López, tiene evidentes problemas de sobrepeso.
Aunque la iniciativa fue aplaudida por diversos sectores afines a Morena, también fue rechazada por otros que consideraron afectará de manera directa a un importante sector comercial.
La extensión para que esta ley alcance comercios afectará a casi 58 mil pequeños comercios cuyos ingresos dependen en un 60 por ciento de sus ventas de bebidas y alimentos, de acuerdo con la Cámara Nacional de Comercio en Pequeño (Canacope).
Con el argumento de que es por motivos de salud y dado que en Oaxaca, la pandemia por Covid 19 ha causado decesos por padecimientos asociados en un 36% a la comorbilidad de obesidad, los diputados aprobaron el decreto sin tomar en cuenta a todos los afectados.
Los legisladores que apoyaron está iniciativa no predican con el ejemplo
Casos como los diputados Ángel Domínguez Escobar por Loma Bonita; Laura Estrada Mauro por Tuxtepec; Leticia Socorro legisladora por Huajuapan de León; Griselda Sosa por Ixtlán de Juárez; Migdalia Espinoza Manuel por Matías Romero.
Así como Othón Cuevas diputado por Santa Lucía del Camino; Horacio Sosa Villavicencio por Zimatlán de Álvarez; Gloria Sánchez López por Juchitán de Zaragoza; así como Fredy Delfín Avendaño, Karina Espino Carmona, Ericel Gómez, Alejandro López Bravo y Rocío Machuca, muestran problemas con su peso.
También, algunos legisladores han evidenciado sus malos hábitos alimenticios, como el diputado Pavel Meléndez que fue captado comiendo una torta, alimento que además de chatarra fue adquirido en un puesto ambulante.
Otro ejemplo de falta de hábitos sanos y despilfarros del Congreso de Oaxaca, es el gimnasio, cuyo inversión fue de más de 700 mil pesos.
El gimnasio fue abandonado por la 62 legislatura local y reabierto el año pasado por la actual, pero sigue en las mismas condiciones.
Los diputados no hacen ejercicio en el gimnasio y ni con su reapertura acuden, por lo menos para ocupar en algo su tiempo y bajar esos kilos demás que exhiben a sus representantes.