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CIUDAD DE MÉXICO, 15 de agosto de 2016.- Estados Unidos continúa su lucha contra el tráfico de heroína y fentanilo. Esta última droga es la preocupación del gobierno norteamericano, la cual es producida clandestinamente en México y traída directamente desde China, pues está relacionada al aumento de tres mil 97 a cinco mil 544 muertes de 2013 a 2014.
El pasado 9 de agosto un Juez federal presentó cargos por delitos múltiples de narcóticos contra 17 acusados por su presunta participación en una red internacional de tráfico de drogas vinculada al Cártel de Sinaloa que operaba en la ciudad de Búfalo, Nueva York, hecho que aporta nuevas evidencias sobre el control que la agrupación criminal mexicana ejerce sobre el comercio de heroína en la costa este de Estados Unidos.
La llamada Organización Gil–Aguirre convirtió a esta ciudad en la “zona cero” para el tráfico de fentanilo y heroína, abasteciendo la alta adicción a estas drogas, que deriva en sobredosis y crímenes violentos.
Un análisis del Centro de Investigación de Crimen Organizado InSight Crime señaló que los tentáculos del Cártel de Sinaloa han llegado muy adentro de Estados Unidos, y que Chicago en particular es utilizado como un importante centro de distribución de droga de la red criminal.
La misma Agencia Federal Antidrogas (DEA, por siglas en inglés) aceptó en 2015 que los grupos criminales mexicanos están dominando el mercado de drogas la Unión Americana, y el de Sinaloa aparece como “el proveedor más activo” de ventas de drogas ilícitas al por mayor.
Fuente: Quadratín México