Revelan a 48 aspirantes para presidir la CNDH; incluyen a Piedra Ibarra
CIUDAD DE MÉXICO, 10 de noviembre de 2019. – Alejandro Rojas Díaz Durán, aspirante a la Presidencia Nacional de Morena, acusó a la lideresa Yeidckol Polevnsky de autoritarismo y la comparó con Nicolás Maduro, presidente de Venezuela.
Por medio de un comunicado emitido este domingo, aseguró desde Ciudad del Carmen, Campeche, que “se está agandallando y será ilegal su cargo. Es dura y tozuda como Madura”.
Esto, luego de que Polevnsky convocara a un nuevo Congreso del partido para el próximo domingo 17 de noviembre, con lo que se prórroga su cargo al frente de Morena.
“No abona en nada y no es garantía de imparcialidad, objetividad, transparencia ni equidad, para llevar a cabo un proceso democrático de afiliación, credencialización y renovación de todos los dirigentes del movimiento”, aseveró Rojas.
Aquí el comunicado íntegro:
Yeidckol Polevnsky se está agandallando y será ilegal su cargo. Es dura y tozuda como Madura: Alejandro Rojas Díaz Durán.
Ciudad del Carmen, Campeche, a 10 de noviembre del 2019.
El agandalle de Yeidckol Polevnsky es una remedo de reelección y profundizará la crisis dentro de Morena.
No abona en nada y no es garantía de imparcialidad, objetividad, transparencia ni equidad, para llevar a cabo un proceso democrático de afiliación, credencialización y renovación de todos los dirigentes del movimiento.
Ella y Bertha Luján deben renunciar a sus cargos, porque ambas son responsables de haber sumido a Morena en una profunda crisis de ilegalidad, de falta de institucionalidad y desorganización sin precedentes.
Que renuncien las dos.
Las ambiciones personales de ambas, son las que nos tienen en el filo de navaja para que Morena se vaya al carajo, debido a su irresponsabilidad política y a que no cumplieron con sus deberes partidistas de respetar la Constitución, la ley y el Estatuto.
Han tomado como rehén a Morena de sus ambiciones vulgares y la han convertido en la arena Coliseo de sus puyas personales, que sólo tienen como propósito que su respectiva “tribu” asuma el control total de un movimiento que es propiedad del pueblo de México.
No tienen llenadera, como diría nuestro fundador.
Los resolutivos del Congreso Nacional son muy claros:
Después del 20 de noviembre ninguna de ellas serán dirigentes y, a partir de esa fecha, serán unas militantes más.
Si insisten en agandallarse en el cargo, estarán cometiendo el delito de usurpación de funciones y el Congreso Nacional no puede extenderles de nueva cuenta la prolongación de sus respectivos cargos, puesto que el mandato último es muy claro y debe cumplirse: debe llevarse a cabo la elección de los dirigentes, y la única vía posible y legal, es por encuestas, tal como ya propuso el Presidente Andrés Manuel López Obrador y el fallo del TEPJF nos dio la razón para que se realicen, porque ya no hay tiempo para convocar a un proceso de renovación de dirigentes por Congresos Distritales, debido a que la integración de un verdadero padrón de militantes, nos llevará —mínimo—6 meses de trabajo continuo, solicitando al INE una prórroga para cumplir con la Constitución, las leyes electorales y el Estatuto de Morena.
No hay de otra.
Solo falta que el Consejo Nacional destituya a todos y designe un CEN de transición neutral, incluyente y democrático.
Ojalá los Consejeros Nacionales tengan altura de miras y piensen en la importancia de que el espíritu fundacional del movimiento prevalezca, para impulsar el cambio de régimen y la necesidad que tenemos para organizar al pueblo de México y continuar con el despliegue de la 4T durante varios sexenios.
Ése es el fondo del tema.
Si no lo hacen, el iceberg del caos en que nos tienen sumergidos las actuales dirigentes, harán que naufrague el Titanic de la 4T en 2021, porque lo han dejado sin rumbo, sin brújula y sin timón, transformando nuestro movimiento, cada día que pasa, en una panga maltrecha y haciendo agua.
Parece que nuestras actuales dirigentes no tienen remedio.
Estaré atento desde la Península de Atasta, Campeche, en donde continuo con mi recorrido nacional.
Por cierto, tampoco acá se pudieron llevar acá las Asambleas Distritales, porque el acarreo fue tan descarado, que los militantes de base impidieron que se consumara el fraude.
Aquí en Campeche no hay una sola oficina de Morena y rasuraron del padrón a casi todos los fundadores y a la mayoría de los morenistas de base.
En Campeche, los supuestos dirigentes de Morena y algunos Diputados Locales y Federales del movimiento, están entregados de pechito al PRI. Una vergüenza.
Hay mucha decepción, frustración y coraje de la gente, que sigue confiando en nuestro Presidente de México, pero que ven con mucho recelo y desconfianza a las dirigentes nacionales, porque ni por equivocación han venido a darles ni las gracias.
Es más, ni siquiera saben quiénes son.
Qué pena.
Así está casi todo el territorio nacional.
Morena es un verdadero desgarriate en todo el país, por culpa de nuestras muy irresponsables dirigentes.
Por eso se quiere ir ya nuestro Presidente Andrés Manuel López Obrador de Morena, porque está confirmando lo que hemos venido denunciando.
Ellas serán las únicas responsables, junto con el Inquisidor de pacotilla, que sólo sirve de tapadera de las múltiples violaciones estatutarias y de escudero para espantar las moscas ideológicas y sueños guajiros de su febril cruzada antidemocrática, facciosa y sectaria contra las bases militantes de Morena.
Ni por asomo conocen al pueblo de México.
Pero les vamos a ganar muy pronto y sacaremos a flote este enorme Titanic que es Morena, para que en el 2021, desde abajo y con la gente, refrendemos el triunfo del 2018 y seamos la punta de lanza y la vanguardia que le abra el caminos de su andar al Presidente Andrés Manuel López Obrador y no la retaguardia y el bulto que le estorba y le incomoda hasta el día de hoy.
Por una Morena democrática.
¡Juntos Haremos Morena!
Alejandro Rojas Díaz Durán, aspirante a la Presidencia Nacional de Morena.
Fuente: Quadratín México