
Anatomía secreta de la inteligencia emocional
CIUDAD DE MÉXICO, 8 de noviembre de 2019.- Este es sin duda mi storytime más sensible que he grabado, movido mis sentimientos por un migrante que fue deportado de Houston, Texas, que buscaba regresar a Ciudad Valles, San Luis Potosí, tras una década fuera de su hogar potosino, porque tendrá que empezar Isaí de cero, me identifico por tantos comienzos auto infligidos que he tenido en mi vida por la seguridad que me dan las herramientas que he adquirido en mi desarrollo.
Caer en la zona de confort está comprobado científicamente cuantos componentes bioquímicos se neutralizan en un ser humano, aniquilando la voracidad del cerebro reptiliano que impulsa a reinventarse y sobreponer el miedo a lo desconocido. Empezar de cero brinda esa oportunidad, de mantenerse ágil, despierto, hasta con movilidad casi involuntaria.
Rodeado por cientos de empresarios de Nuevo León, dentro del imponente Museo de Arte Contemporáneo (MARCO) de Monterrey, al salir me abordó un joven notoriamente desnutrido que solo pedía la ubicación de la carretera nacional donde pasaban los tráileres rumbo a Tamaulipas ¿Cómo no lo iba ayudar a Isaí?
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