En México gobierna “la dictadura perfecta”

OAXACA, Oax., 26 de noviembre de 2017.- El Estado mexicano ha evolucionado de manera muy lenta, esto se debe, desde mi óptica, a la falta de una definición sobre el modelo de nación que se desea construir.

De tal forma, que esas ambigüedades han llevado a afirmaciones como la del Premio Nobel de Literatura quien en 1990 afirmó que en México gobierna “la dictadura perfecta” y eso que, Mario Vargas Llosa asume en la práctica posiciones de derecha.

En un Estado autoritario como el que han hecho los poderes fácticos en nuestro país, donde usan las instituciones, la ley y la justicia para lograr imponerse, encontramos reiterados ejemplos de este abuso de poder.

En estas últimas tres semanas, con sendos tiros de precisión se evidencia que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (sí, esa de la que Juárez fue presidente en la postrimería de la década de los 50, en los años 1800) actúa por consigna, alejándose de aquella máxima de Themis o Iustitia, y menos se sientan en el puntear para decidir, inspirados, la aplicación al caso concreto el derecho vigente.

A qué me refiero, pues ni más ni menos que a la destitución de Israel Moreno Rivera, como titular de la delegación Venustiano Carranza en la Ciudad de México y, la consignación al Ministerio Público Federal de José Manuel Ballesteros López, jefe delegacional de esa misma demarcación, en el periodo inmediato anterior.

Agreguemos un dato más, a la semana de esa resolución de revocación de mandato se publicitó que, Ricardo Monreal Ávila, Jefe Delegacional de Cuauhtémoc en la misma Ciudad de México., correría la misma suerte que el de la delegación Venustiano Carranza. El acto jurídico que es una sentencia judicial, adquiere ya elementos para tratar de encontrar el objetivo de ¿por qué? tan seguidos dos casos en el mismo sentido.

De acuerdo a lo que se conoce públicamente el delegado, ahora ex delegado de Venustiano Carranza, dejó de cumplir una ejecutoria de amparo.

Cuyo objeto, desde luego, no es la protección del derecho del trabajo de los actores en los juicios laborales, que dan pie a los juicios de garantías cuyas sentencias no fueron acatadas por los políticos al frente de esa territorialidad.

En efecto, retomando una máxima popular usada por la maestra Soledad Baltazar Segura, quien dice que: “no es que sea desconfiado, sino que soy malpensado”, el sospechosismo invade y nos da a pensar que, es muy casual y curioso que de repente en un corto tiempo, se haga notar la mano de la Corte para lograr que las resoluciones de una sentencia de juicio de amparo se hagan valer y hasta se llegue a la destitución de cargos públicos ganados en urnas.

En tal sentido, considero entonces que hay una gran cuota de manejo político para, “tantear las cosas” y ver qué pasa, si se empieza a preparar el camino legal para que llegado el caso de que, aquél que “manda al diablo las instituciones” ganara las elecciones del 2018 y no se le pueda parar en su eventual triunfo ni con fraude y, se tenga que recurrir por su desprecio a las instituciones a una eventual carta bajo la manga.

¿Cuál carta? ¡Fácil! el uso de una sentencia de la Corte para que se le destituya del cargo y se ordene revocarle el mandato, nada más ni nada menos que, de Presidente de la República ¿demasiadas novelas de Walt Disney?

A propósito de cuentos y a tono con lo lucubrado, recuerden que para Antoine de Saint-Exupéry: “Las personas mayores nunca pueden comprender algo por sí solas y es muy aburrido para los niños tener que darles una y otra vez explicaciones” El lenguaje es fuente de malos entendidos.”

¿A poco no? eso de usar malos pensamientos para atisbar es de adultos, así como en el caso de las Sentencias dictadas por la Suprema Corte de Justicia de la Nación para revocar el mandato. Reflexiones que sólo son Fundamentos.