Diferencias entre un estúpido y un idiota
CIUDAD DE MÉXICO, 14 de septiembre de 2018.- 1.- Créalo, no es por alarmar a nadie pero parece que en 2019 la cobija presupuestal seguirá achicándose.
Pese a todo, los magos de los números hacendarios aseguran que no hay problemas en el horizonte de la Cuarta Transformación.
El optimismo radica en que con los ahorros previstos –recortes de salarios, desaparición de oficinas y ajuste de programas duplicados o sin justificación- dispondrán de unos 500 mil millones de pesos suficientes, dicen, para financiar los programas prioritarios del nuevo gobierno.
Pero las cifras no cuadran en materia de recaudación tributaria. Por ejemplo Gerardo Esquivel, virtual subsecretario de Egresos, admitió ante empresarios de la Concamin que reducir el IVA y el ISR en la frontera norte del país repercutirá en una disminución de hasta 40 mil millones de pesos.
Pero resulta que hay opiniones que hacen pensar que el hoyo en la bolsa de la recaudación tributaria podría ser más grande. En su cuenta de Twitter, Aristóteles Núñez @AristotelesN, ex titular del Servicio de Administración Tributaria (SAT), estimó que la recaudación tendrá una merma de 40 mil millones de pesos pero sólo por reducir el IVA.
Y agárrese. Por ajustes al ISR fronterizo el impacto se calcula en 80 mil millones de pesos, de tal suerte que haciendo bien las cuentas se estarían dejando de recaudar 120 mil millones de pesos en el primer año del próximo sexenio, que en términos comparativos equivale a tres veces el presupuesto de la UNAM.
El beneficio para quienes viven en aquella región del país será evidente, pero hasta ahora nadie ha dicho cómo y de dónde van a recuperar esos recursos. ¡Recórcholis!
2.- Las malas noticias también son noticia.
Aunque sea para el análisis, la sola idea de que pudiera aumentar a 68 años la edad tope para que una persona pueda pensionarse en México, no es una mala señal, es pésima.
La propuesta se evaluará, anticipó el propio Gerardo Esquivel, a la mitad del próximo gobierno.
Expertos en el tema como el economista Antonio Sandoval, sieforeretiro.com, tienen claro lo que podría ocurrir: “Aunque pudieran existir intentos, es poco probable que el sistema pensionario mexicano se revierta, pues eso provocaría un terremoto social y político de tal magnitud que el próximo gobierno no podría soportarlo. Hay gente preparada que puede aconsejar lo que sí y lo que no puede hacer”.
También hace la pertinente aclaración de que el dinero de los trabajadores depositado en los fondos del sistema de ahorro para el retiro no es expropiable, pero puede invertirse en proyectos de desarrollo. Más bien se antojan reformas para reducir las comisiones que cobran las Afores y la revisión de las tasas de aportación a las cuentas de ahorro.
Por lo pronto la mala noticia es que los adultos mayores que aspiran a registrarse en el programa de la pensión universal lo podrán hacer pero cuando cumplan 68 años (antes era de 65 años). Así es que tendrán que seguir esperando pacientemente a que les hagan justicia la revolución.
3.- Otto al bat.
Como para no perder el estilo, ahora tocó a los senadores un segundo intento para mayoritear un exhorto para suspender la evaluación educativa prevista para noviembre.
El primer intento fallido ocurrió en el pleno de San Lázaro, donde entre consignas, toma de tribuna y sombrerazos, la mayoría alzó la voz para exigir que se suspendiera la evaluación a los maestros. Estaban tan emocionados que el diputado Azael Santiago lo rubricó en twitter con un no a la “aproVación”.
El caso es que Otto Granados, secretario de Educación, los bateó literalmente y les dejó claro que no suspenderá la evaluación hasta en tanto no se modifique la Reforma Educativa. O sea el próximo sexenio.
Hay que destacar que Martí Batres demostró que sabe del trabajo legislativo pues en lugar de mandar a la hoguera la Reforma Educativa propuso una iniciativa para modificarla y así evitar que la evaluación repercuta directamente en el ingreso, promoción, reconocimiento y permanencia de los maestros en el sistema educativo. A ver si aprende algo Mario Delgado.
4.- El Godinato se enseñorea en el Congreso.
Corre el rumor que esta navidad los únicos regalos autorizados que podrán recibir y dar los diputados y senadores son túppers para las quesadillas y termo cilindros para el café. Nada de champán (sic), eh.
5.- Claudia Sheinbaum anunció que desaparecerá la CDMX como marca institucional del gobierno capitalino. Parece que alguien no puede ver a Miguel Ángel Mancera ni en pintura.