Confirma BMV licencia de Azcárraga ante investigación de EU
MORELIA, Mich., 3 de octubre de 2016.- Una discusión fue, aparentemente, la que desencadenó el homicidio del sacerdote José Alfredo López Guillén. Así lo afirmó el procurador de Justicia de Michoacán, José Martín Godoy Castro.
De manera muy puntual aclaró que la investigación del homicidio no se hizo por secuestro, y de manera rotunda dijo que no se trató de un acto vinculado a la delincuencia organizada.
En rueda de prensa dijo que Vicente N. y Francisco N., amigos del clérigo, se encontraban en la casa parroquial conviviendo con el sacerdote, cuando en un momento dado tuvieron un altercado y entre ambos hombres sometieron al párroco, lo envolvieron en una cobija, y luego lo encajuelaron en el carro Jetta, propiedad de José Alfredo.
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Quadratín Michoacán