Aunque lo nieguen, sí hay terrorismo
SAN LUIS POTOSÍ, 5 de agosto de 2020.- Me resisto a creer el general Luis Crescencio Sandoval se haya prestado como elemento de coacción del Ejecutivo para presionar al Poder Judicial, la mañana de este martes en Palacio Nacional, por la captura de José Antonio Yépez “El Marro”.
Las palabras del Secretario de la Defensa no salieron con fluidez, tal vez por el peso de su pronunciamiento o la lectura entre líneas que se traduce en preocupación de que un juez local o federal deje en libertad al líder del Cártel de Santa Rosa de Lima, una gavilla que no tiene las dimensiones de los cárteles clásico como el de Sinaloa, el del Golfo o el de Jalisco.
En voz del General Secretario: «Que jueces estatales y federales cumplan con la responsabilidad que les toca, que el esfuerzo de militares se vea reflejado en el de las autoridades judiciales».
Otra versión que llega a mis manos es que en el operativo la autoridad local transgredió protocolos y violó el debido proceso para beneficio de los inculpados, toda vez que en operativo de este tipo hay infiltrados entre los locales.
Con el presidente a sus espaldas, vi al General Sandoval fuera de lugar en el reclamo al poder autónomo que encabeza el ministro Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
Me pareció una especie de vocero seleccionado por ser el portador de las mejores calificaciones en la aceptación pública, sobre cualquier otra autoridad de seguridad pública.
Esto es, la Iglesia es la única institución mejor calificada que el Ejército y la Marina en las encuestas de opinión, y estas a su vez están muy por encima de cualquier autoridad de los tres niveles de gobierno.
¿Le pidieron en la reunión del Gabinete de Seguridad de las 6 de la mañana, encabezada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, presionar a jueces locales y federales, o fue a título personal por la frustración al ver libres a un sinnúmero de delincuentes que pasan por los juzgados..? ¿Se vio comprometido por el empoderamiento otorgado por el Presidente López Obrador en un sinnúmero de actividades administrativas, proyectos, manejo de presupuesto federal, que compete al ámbito civil..?
No obstante hay grandes coincidencias en la opinión pública de que la corrupción, y todo tipo de tráfico, creció tanto, que solamente las Fuerzas Armadas pueden frenarlo.
Aunque también está la contratesis que formula que los países deben mantener a las Fuerzas Armadas al margen de actividades de competencia civil, precisamente para alejarlas de esa fuerza corruptora con tentáculos internacionales.
¿Qué pasaría si el ministro presidente Zaldívar saliera en conferencia de prensa a decir todo lo mal que hizo el Ejército al capturar y liberar a Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, en Culiacán, y las sospechas que esto provoca al involucrar a un comando relativamente pequeño frente al poder del Cártel de Sinaloa, de todos conocido ..?
Lo último que necesitamos en este cúmulo de problemas, con el termómetro arriba de 40 grados, es enfrentamientos entre las Fuerzas Armadas y el Poder Judicial. Dan el blanco AMLO y Almirante Ojeda con nombramiento de Gómez Meillón en API de Manzanillo Ya nadie se acuerda del berrinche de Javier Jiménez Espriú que lo llevó a la renuncia de la SCT por la fallida conducción de la dependencia que llevó al presidente Andrés Manuel López Obrador al transferir el mando de los Puertos a la Secretaría de Marina del Almirante Rafael Ojeda Durán.
Por lo pronto, el Ejecutivo dio en el blanco en el cambio de estafeta en la Administración Portuaria Integral (API) de Manzanillo, uno de los puertos más conflictivos, especializado en la importación y exportación de material químico y mercancías que convirtieron a Colima en el estado más violento, según palabras del presidente.
El nombramiento del almirante Salvador Gómez Meillón como titular de la API tuvo una excelente recepción, unánime, hasta de partidos, alcaldes y legisladores de oposición.
El PAN Estatal de Colima a través de un comunicado de Alejandro García Rivera, líder albiazul en el estado, calificó como una buena decisión el anuncio de la próxima llegada del almirante Gómez Meillón, además originario de la entidad.
De igual forma, la alcaldesa de Manzanillo, Griselda Martínez, quien sufrió un atentado el 26 de julio del año pasado, manifestó su apoyo al almirante al señalar que está “segura está de que trabajarán coordinadamente en beneficio de las familias manzanillenses”.
La delegada del Gobierno Federal Indira Vizcaíno destacó la honestidad y el patriotismo de Gómez Meillón, al tiempo en que el diputado Vladimir Parra Barragán y el senador Joel Padilla Peña del PT apoyaron la atinada decisión al Secretario Ojeda y del presidente que en la conferencia mañanera declaró: “Necesitamos un marino en Manzanillo”. Lo dicho, en el blanco.
Fuente: Quadratín San Luis Potosí