Inclusión, necesaria en la construcción de una cultura de paz: UAM

OAXACA, Oax. 29 de junio de 2025.- En el marco del 28 de junio, Día Internacional del Orgullo LGBTQ+, tres especialistas de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) reflexionaron sobre los desafíos, avances y fundamentos científicos en torno a la diversidad sexual, la inclusión y la construcción de una cultura de paz.

Durante su participación, el doctor Humberto Guerra de la Huerta advirtió que uno de los grandes pendientes es la situación de vulnerabilidad en que se encuentra la población trans, especialmente las personas nacidas varón.

Señaló en un comunicado que este grupo enfrenta violencia, precariedad social y económica, así como fuertes estigmas arraigados en el machismo.

Guerra, investigador del Departamento de Política y Cultura en la UAM Xochimilco y autor del libro De lo joto a lo macho, afirmó que la masculinidad hegemónica continúa imponiendo jerarquías. “La discriminación no ha desaparecido; sigue siendo cotidiana”, puntualizó. Además, defendió el uso del lenguaje inclusivo como una expresión legítima de cambio social y cultural.

Por su parte, el doctor Eduardo de la Fuente Rocha, del Departamento de Educación y Comunicación, recordó que los derechos conquistados por la comunidad LGBTQ+ pueden enfrentar retrocesos dependiendo del contexto político. Puso como ejemplo la situación en Estados Unidos, donde algunas propuestas buscan invalidar derechos ya reconocidos.

“Mientras algunos grupos buscan el poder a costa de otros, este movimiento persigue la alegría de vivir”, expresó. Destacó también que en México se han logrado avances importantes, como el matrimonio igualitario y la adopción, aunque aún persisten formas de discriminación por género, clase o apariencia, incluso dentro de la propia comunidad LGBTQ+.

Desde una perspectiva científica, la doctora Adriana Margarita Morales Otal, del Departamento de Biología de la Reproducción en la UAM Iztapalapa, afirmó que la orientación sexual no es una elección, sino una manifestación natural de la diversidad biológica. Con base en investigaciones con modelos animales, señaló que la diversidad sexual es observable y medible, y no se reduce a categorías binarias.

“Si la naturaleza misma exhibe esta diversidad, ¿por qué el ser humano insiste en negarla o castigarla?”, cuestionó. Añadió que la ciencia puede ayudar a desmontar prejuicios y promover una cultura de respeto, al demostrar que la orientación sexual surge de la interacción entre factores hormonales, neurológicos y experiencias tempranas.

La investigadora reconoció que enfrentó críticas por afirmar que se nace con una orientación sexual, pero subrayó que tras más de dos décadas de estudios puede sostener con firmeza que la ciencia respalda a la diversidad. “Hoy la ciencia está del lado de este movimiento por el respeto, la inclusión y la paz”, concluyó.