Cortinas de humo
CIUDAD DE MÉXICO, 19 de enero de 2021.- A estas alturas –a 11 meses de que se detectó en México la pandemia–, la pregunta ya no gravita en torno a las razones por las que el presidente mexicano debe ser llevado a prisión, como resultado del manejo equivocado del Covid-19.
¿Y por qué esa ya no es la gran interrogante?
Porque, a querer a no, están a la vista cientos de miles de vidas perdidas de manera aberrante e inútil; cientos de miles de razones que presumen delitos como “crimen de Estado”, “crímenes de lesa humanidad” y hasta “genocidio”.
Y es que al 19 de enero del 2021 –al día de ayer–, se contabilizan más de 140 mil muertes a causa de la pandemia, según números oficiales. Pero si vamos a las cifras extraoficiales –a los números negros de la pandemia–, la cantidad de mexicanos muertos supera los 500 mil.
Dicho de otro modo, resulta que a 11 meses de iniciada la pandemia, se confirma que el de Obrador no sólo es un gobierno criminal, sino que el propio presidente es el mayor criminal del Estado mexicano.
Y es que, como saben, un crimen de Estado es aquel que se comete contra los ciudadanos indefensos y en el que participan uno o más agentes del propio Estado; policías, militares, políticos y hasta el mismísimo presidente.
Y en el caso de la pandemia, a lo largo de los primeros 11 meses de la recurrencia viral, el gobierno de AMLO pasó de la negación de la tragedia, a la minimización de sus efectos y llegó al extremo de engañar a los ciudadanos con el cuento de que “se aplanó la curva” y/o que, “se domó” el virus.
Sin embargo, fue mentira todo el discurso oficial sobre el Covid-19; fue mentira la atención prioritaria y, sobre todo, es una escandalosa mentira oficial la contención.
Lo cierto es que México es uno de los países con mayor letalidad en el mundo; la Ciudad de México es la concentración humana con el mayor número de fallecidos en el orbe y en México se producen el mayor número de contagios.
Por eso obliga preguntar: ¿De qué tamaño es la mentira oficial, en el caso de la fallida atención del gobierno de AMLO a la pandemia, cuando en 11 meses los ciudadanos no hemos escuchado una sola verdad oficial?
A continuación, algunas de las principales mentiras.
1.- Fue mentira que el gobierno federal pudiera domar la pandemia, como lo pregonó López Obrador desde el arranque del virus.
2.- Fue mentira que el gobierno federal y todo el sistema de salud estuvieran capacitado para hacer frente a un virus cuya existencia fue negada por el propio presidente.
3.- Fue mentira que el sistema de salud pública recibirá los recursos humanos y económicos para derrotar a la pandemia.
4.- Fue mentira que los trabajadores de la salud estuvieran protegidos. Incluso, la letalidad costó la vida a miles de médicos, enfermeras y, en general, trabajadores de la salud.
5.- Fue mentira la existencia de suficientes camas con ventilador para atender las emergencias, como lo prometió el gobierno.
6.- Fue mentira que el gobierno federal haya comprado vacunas en el mundo, como para atender la demanda de 130 millones de mexicanos.
7.- Fue mentiroso el recuento de contagios y muertos, al grado de que hoy nadie sabe, a ciencia cierta, el tamaño de la tragedia y del crimen de Estado que costó cientos de miles de vidas
8.- Fue mentirosa la versión del gobierno de AMLO, sobre la cantidad de vacunas compradas a los grandes laboratorios. Hoy nadie sabe cuantas vacunas se han aplicado, cuántas faltan por aplicar y cuántas por comprar.
9.- Fue mentira el uso arbitrario de los semáforos, ya que nadie hizo caso a las medidas impuestas y a los llamados a mantener una sana distancia.
10.- Y resultó una mentira que la ONU le haya pedido al gobierno de AMLO dejar sus vacunas a los países más pobres.
En pocas palabras, existen pruebas contundentes que avalan que el gobierno federal es responsable de graves violaciones a los derechos humanos de cientos de miles de mexicanos.
Son lapidarias las pruebas de el gobierno federal no hizo nada para contener la pandemia y de que el presidente Obrador dejó en el abandono a cientos de miles de mexicanos.
Y son contundentes las pruebas de que cientos de miles de mexicanos pudieron salvar la vida, si el gobierno hubiese actuado de manera responsable.
Ya conocemos los presuntos delitos por los que deberá parar en la cárcel el criminal de Estado, llamado López Obrador.
Sí, solo falta saber quién será el valiente de presentar la denuncia penal, contra López Obrador.
Al tiempo.