Avanza la rendición de cuentas como política de Estado: Colmenares
OAXACA, Oax., 17 de febrero de 2019.- Con el tema, “La Impartición de Justicia con Perspectiva de Género”, el especialista Miguel Ontiveros Alonso, reconocido jurista en materia penal a nivel nacional, aperturó el ciclo académico 2019, de los Estudios de Especialización Judicial.
En un comunicado se informó que ante magistradas, magistrados, jueces federales y locales, alumnas, alumnos y docentes de las especialidades, así como de personal jurisdiccional y administrativo, e invitados especiales, expresó que hoy en día no se puede formar parte de un Poder Judicial sino se trabaja con perspectiva de género.
El acceso e impartición de justicia es un derecho humano y por consecuencia, todas y todos debemos ser juzgados bajo este tenor, dijo.
Explicó que a partir de la Reforma Constitucional de Derechos Humanos del año 2011, todos los miembros del Poder Judicial de Oaxaca y de otros estados, así como también todas las y los jueces de este país, están obligados a impartir justicia con base en la jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Ontiveros Alonso, señaló que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), emitió el “Protocolo para Juzgar con Perspectiva de Género”, el cual debe ser un documento dominado por todas y todos los impartidores de justicia, porque promueve la difusión de criterios jurisprudenciales emitidos por tribunales nacionales e internacionales en materia de igualdad entre hombres y mujeres.
Así también fomenta la creación de criterios interpretativos que analizan las desigualdades por razones de género y las relaciones asimétricas de poder.
Explicó, que en dicho protocolo, se incluyen criterios denominados categorías sospechosas, llamadas también rubros prohibidos de discriminación, las cuales permiten verificar si existen o no estereotipos de género o determinaciones sexistas en el contenido normativo, que deban ser cuestionados con base en estándares constitucionales y convencionales.
Dentro de estas categorías, por mencionar algunas, están: mujer, niña, persona indígena, migrante, afrodescendiente, persona con discapacidad, adulto mayor, entre otras.
“Como impartidor de justicia, tienes que hacer un alto en el camino y aplicar el ejercicio de autoevaluación que viene en el protocolo de la SCJN, porque lo que no podemos permitirnos, es discriminar desde los tribunales, al contrario, se tiene que ser equilibrado para eso está la perspectiva de género”, expuso el jurista.
Del mismo modo, el doctor en derecho penal, indicó que es preciso que las y los juzgadores reconozcan las circunstancias personales de las personas involucradas en la comisión de un delito, porque apuntó que no es lo mismo, hechos que parecen iguales, en contextos diferentes.
“No es lo mismo tocar el pecho de un hombre a tocar el pecho de una mujer, porque al tratarse de un hombre o una mujer el contexto es totalmente diferente y valorarlo es obligación de las y los impartidores de justicia, así como de las y los alumnos que cursan las especialidades de la Escuela Judicial del Estado”, dijo el destacado ponente.
Durante su ponencia, el jurista, ejemplificó que en Alemania las mujeres que privan de la vida a su maltratador, son atendidas como víctimas, sin embargo en México, se imponen en automático sentencias con muchos años de prisión, y que esto se debe a la falta de perspectiva de género.
Afirmó, que existen casos donde mujeres sometidas a la violencia y abuso por parte de un hombre, cometen homicidio y es ahí donde las y los juzgadores deben observar las circunstancias personales, porque expresó que no se puede condenar en automático a una mujer que en un momento de impacto mató a su esposo o pareja, al darse cuenta que no solo ella fue atacada, sino que también su hija o hijo fueron dañados o abusados.
Señaló que, en este tipo de casos, hay una categoría sospechosa que debe ser analizada, hay una mujer.
El especialista en derecho penal, enfatizó que los artículos 1º y 4 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, así como las disposiciones en materia de derechos humanos de los tratados internacionales, prevén el derecho a la igualdad entre hombres y mujeres, así como la obligación de no discriminar por razones de sexo y género.
Sin embargo, dijo que esta consigna constitucional no se satisface con el mero pronunciamiento de la norma, es decir, no basta con que la ley nos mencione como iguales para que esa igualdad ocurra en la realidad y desaparezcan las desigualdades materiales que impiden o condicionan el ejercicio de los derechos.
En este sentido, enfatizó, que la impartición de justicia con perspectiva de género, tiene ser estandarte de los tribunales e instituciones dedicadas a impartir justicia con el fin de vincular los principios constitucionales de igualdad, universalidad, interdependencia, indivisibilidad y progresividad de los derechos humanos.
Ello, para justificar con razonamientos fundados el uso de las normas o los criterios de interpretación más protectores para las personas que se encuentra en una situación asimétrica de poder o de desigualdad estructural.
El destacado abogado, finalizó diciendo que las diferencias de género y las desigualdades en torno a ellas no pueden ni deben traducirse en obstáculos que impidan el ejercicio igualitario de los derechos humanos y que es obligación de todas y todos los juzgadores, administrar e impartir justicia con perspectiva de género.
“Por encima de la ley está la persona, están los derechos humanos”, dijo el experto en derecho penal.
Al término de la ponencia, en representación de la Magistrada María Eugenia Villanueva Abraján, titular del Poder Judicial del Estado de Oaxaca, el magistrado Alejandro Enrique Figueroa, integrante de la Primera Sala Penal, agradeció a Miguel Ontiveros su brillante participación y mencionó que juzgar con perspectiva de género es un firme compromiso del Poder Judicial del Estado y una de las prioridades de la actual administración del Tribunal Superior de Justicia.