Día 18. Genaro, víctima de la seguridad nacional de EU
Valéry escribe sobre poesía, variaciones
¿Cómo perecer, oh camaradas?
Valéry, Introducción al estudio de la Diosa
En un momento llegó la música.
“Hay que saber pagar a un precio desconocido el no utilizar los saberes conocidos”.
Escribo.
El señor Rojo levanta la mano: “introducir juegos de saberes, ocultar el aforismo”.
Mientras cantan los Enanitos Verdes descubro en el piso, tirado, el lapicero.
En su inmovilidad está la poesía (nace para establecer una demanda, el cambio de signo).
¿Quién me espera?
¿El piso o el lapicero?
¿Quién posee la inmovilidad?
El instante.
Escucho música.
Si miro al piso busco perseguido por miles y miles de imágenes (montadas sobre armonías portadoras de la forma).
Si estiro la mano
moveré el polvo,
aparecerá
lo oculto.
En tanto, ¿quién posee el sueño donde aparece el lapicero tirado en el piso?
Son tantas y tantas
las preguntas
sobre un posible
origen,
que sonidos
e imágenes percibidas
se pierden y aparecen
hasta conseguir
sostener
en mis manos
el objeto
con qué escribir.
Quien desespera afila el poema.
“un extraño de pelo largo”.
Entra la música, alguien me espera.
¿Quién me espera? la palabra que nombra los silencios en la noche donde arden fogatas frente lo inasible, el ejército de los cielos, los zancudos.
Escucho canciones que entonan ejércitos enemigos
(“cargando tu cruz/
por el resto de tus días”).
Ya vendrán
las palabras colmadas
con dulce olor de canciones
extranjeras,
volveré
a escuchar
sus notas
que despiertan
el alba.
En tanto, pasa el instante que oculta palabras sencillas tras la fina silueta del lapicero tirado en el piso.
Sé que me aguarda.
Una suerte de revelación me dice el instante propicio que cae sobre el brillo que protege la tinta del lapicero.
Quien vela/carga la poesía.
¿De dónde vienen las palabras?
¿A quién pertenecen?
A los zancudos
infernales,
que caen
sobre la diosa
aludida por
Valéry.
El señor Rojo observa la escena
bien sabe el desenlace,
pero calla
para no traicionar
su naturaleza
de dibujo
sobre el cuaderno.