Paloma Sánchez-Garnica, premio Planeta 2024, y Beatriz Serrano, finalista
CIUDAD DE MÉXICO, 13 de enero de 2018.- El fotógrafo y escritor británico Lewis Carroll, autor de “Alicia en el país de la maravillas” es recordado a 120 años de su muerte, ocurrida el 14 de enero de 1898, con la exposición “Victorian Giants: The Birth of Art Photography” que incluye retratos de Alicia Liddell, la niña que lo inspiró a crear su célebre obra.
La muestra que se presentará del 1 de marzo al 20 de mayo en la National Portrait Gallery de Londres, reúne por primera vez las obras de cuatro de las figuras más famosas de la fotografía artística, Lewis Carroll, Julia Margaret Cameron, Oscar Rejlander y Clementina Hawarden, señala la página oficial del museo, de acuerdo con información de Notimex.
Reitera que estos cuatro artistas llegarían a encarnar lo mejor de la fotografía en la época victoriana.
Su enfoque experimental hacia la toma de imágenes y las actitudes radicales hacia la fotografía han informado a la práctica artística desde entonces.
Fotógrafo, escritor y matemático y experto en lógica el británico Charles Lutwidge Dodgson, mejor conocido como Lewis Carroll, nació en Daresbury, Cheshire, Inglaterra el 27 de enero de 1832.
Fue el tercero de los hijos del matrimonio Dodgson, y el primer varón. Cuando Charles tenía 11 años de edad, su padre fue nombrado párroco de la localidad de Crofton-Tees, en North Yorkshire, y toda la familia se trasladó a la espaciosa rectoría que sería la morada familiar durante los siguientes 25 años.
El joven Charles inició su educación en su propia casa.
Las listas de sus lecturas conservadas por la familia, atestiguan su precocidad intelectual: a los siete años leyó «The Pilgrim’s Progress», de John Bunyan.
De acuerdo con sus biógrafos, Lewis sufrió de un tartamudeo que tendría efectos perjudiciales en sus relaciones sociales durante toda su vida, lo mismo que de sordera en el oído derecho a consecuencia de una enfermedad.
A los 12 años fue enviado a una escuela privada en las afueras de Richmond, donde parece que se integró bien, y en 1845 fue trasladado al Rugby School, donde fue evidentemente menos feliz, como él mismo lo escribió algunos años después.
Su brillantez como matemático le hizo ganar, en 1857, un puesto de profesor en Christ Church, que desempeñaría durante los 26 años siguientes, aun cuando no parece haber disfrutado mucho de esta actividad.
Cuatro años después fue ordenado diácono. Carroll trató de combinar los ideales de libertad y belleza con la inocencia edénica, donde el cuerpo humano y el contacto humano podían ser disfrutados sin sentimiento de culpa.
Morton Cohen, su principal biógrafo, anota que Carroll rechazó rotundamente el principio calvinista del pecado original y lo sustituyó por la noción de la divinidad innata.
La obra definitiva acerca de su actividad como fotógrafo «Lewis Carroll, Photographer», de Roger Taylor, publicada en 2002, documenta exhaustivamente cada una de las fotografías de Lewis Carroll que se han conservado hasta nuestros días.
Abandonó repentinamente la fotografía en 1880, pese a que después de 24 años dominaba completamente el medio, disponía de su propio estudio en el barrio de Tom Quad y había creado unas tres mil imágenes.
Menos de mil han sobrevivido al tiempo y a la destrucción intencionada.
El escritor registraba cuidadosamente las circunstancias que rodeaban la creación de cada una de sus fotografías, pero su registro fue destruido.
Fue entonces cuando comenzó a escribir poesía y cuentos que envió a varias revistas, los cuales le reportaron un éxito discreto.
Entre 1854 y 1856 su obra apareció en las publicaciones de ámbito nacional «The Comic Times» y «The Train», así como en revistas de menor difusión, como la «Whitby Gazette» y el «Oxford Critic».
Años antes de «Alicia en el país de las maravillas» ya buscaba ideas de cuentos para niños que pudieran proporcionarle dinero: «Un libro de Navidad» , que podría venderse bien, también «Instrucciones prácticas para construir marionetas y un teatro».
En 1856 publicó su primera obra con el seudónimo que le haría famoso: un predecible poemilla romántico, «Solitude», que apareció en «The Train» firmado por Lewis Carroll.
El sobrenombre lo creó a partir de la latinización de su nombre y el apellido de su madre.
Así, Lutwidge fue latinizado como Ludovicus, y Charles como Carolus, para regresar al inglés como Lewis Carroll. También en 1856, un nuevo deán, Henry Liddell, llegó a Christ Church con su joven esposa y sus hijos, que tendrían un importante papel en la vida del escritor, pues entabló una gran amistad con la madre y los niños, especialmente con las tres hijas: Lorina, Alice y Edith.
Se convirtió en una especie de tradición para Carroll llevar a las niñas de picnic al río, en Godstow o en Nuneham, y en una de estas excursiones, concretamente, según sus diarios, el 4 de julio de 1862, cuando inventó el argumento de la historia que más tarde llegaría a ser su primer y más grande éxito comercial.
En otro viaje con las niñas y el reverendo Robinson Duckworth, a partir de éste y de Alice, la de mediana, empezó a improvisar la narración, que entusiasmó a las niñas, especialmente a la propia menor de 10 años.
Después de la excursión, la chica le pidió que escribiera la historia, por lo que Carroll pasó una noche componiendo el manuscrito y se lo regaló a Alice Liddell en la siguiente Navidad.
El manuscrito se titulaba «Las aventuras subterráneas de Alicia» y estaba ilustrado con dibujos del propio autor.
Se especula que la heroína de la obra está basada en Alice Liddell, pero el escritor negó que el personaje estuviera basado en persona real alguna.
Tres años más tarde, movido por el gran interés que el manuscrito había despertado entre todos sus lectores, llevó el libro, convenientemente revisado, al editor Macmillan, a quien le gustó de inmediato.
Tras barajar los títulos de «Alicia entre las hadas» y «La hora dorada de Alicia», la obra se publicó finalmente en 1865 como «Las aventuras de Alicia en el País de las Maravillas», firmada por Lewis Carroll.
Las ilustraciones de esta primera edición fueron de John Tenniel.
Lewis Carroll falleció el 14 de enero de 1898, en la localidad de Guilford, Surrey, Reino Unido.