¿A quién corresponde defender?
Morelia, Mich., 12 de septiembre, 2016.- El presidente de la República de Bielorrusia, Alexander Lukashenko aseguró que una mujer no puede ser aún presidenta, al referirse a la candidata demócrata a la Presidencia de Estados Unidos, Hillary Clinton. Evidentemente, machistas hay en todos lados.
Sin embargo, me recordó una conversación que tuve hace poco con una persona que opinaba que las actitudes tan descabelladas que tiene el contrincante de Clinton, el republicano Donald Trump, es una estrategia, pues es la única forma de lograr que una mujer llegue al cargo político más importante en el vecino país del norte.
Es evidente que en muchos países, incluido el nuestro y también Estados Unidos, prevalecen prejuicios en torno al hecho de que una mujer llegue a manejar los destinos de una nación. La lucha de las mujeres por incursionar en la política ha sido ardua en muchos lugares, recordemos que en México fue hasta 1953 cuando se reconoció el derecho del sector femenino al voto.
Hay ya muchos casos en que una mujer ha llegado a ganar cargos de elección popular, pero desafortunadamente no a todas les ha ido bien, tal es el caso de la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, que recientemente fue destituida del cargo: o como la alcaldesa de Chenalhó, Chiapas, Rosa Pérez Pérez, que fue prácticamente obligada a renunciar por presiones de grupos locales.
No soy partidaria de Hillary Clinton, -mucho menos de Donald Trump-, pero tampoco coincido con el líder bielorruso en que una mujer no puede llegar a ser la presidenta de la nación más poderosa del mundo.
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