Presentará Seculta 11 actividades artísticas en la Guelaguetza Ñuu Savi
María Teresa Cedillo Nolasco
El ocho de abril del presente año, México atestiguará nuevamente un eclipse de sol que podrá apreciarse en su totalidad en algunas localidades del país, como Mazatlán, Durango, Torreón, y Monclova, en tanto que en otras como Toluca y Ciudad de México se observará en un 79 por ciento, de acuerdo con lo expuesto por el doctor Alejandro González Samaniego, investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
Durante la charla que ofreció en la Unidad Lerma acerca de este acontecimiento de la naturaleza, convocada por la Dirección de Comunicación del Conocimiento de la Rectoría General, el astrofísico expuso que un eclipse ocurre cuando la luz proveniente de un cuerpo celeste es bloqueada por otro cuerpo eclipsante; en este caso, el fenómeno que sucede entre los objetos astronómicos, la luna, el sol y la tierra, que “son los que más conocemos a simple vista”, informó la UAM en un comunicado.
El investigador del Departamento de Ciencias de la Tierra dijo que se trata de un fenómeno fascinante y espectacular en el cual la luz del sol quedará bloqueada por otro cuerpo celeste, la luna, que generará una sombra sobre una región de la tierra, la cual quedará en penumbra.
El eclipse podrá verse también en algunas ciudades de Estados Unidos y Canadá, pero México tendrá las mejores condiciones climáticas para observarlo en su fase total, sobre todo en las ciudades de Mazatlán, Durango, Torreón y Monclova a las 11:07, 12:12, 12:16 y 12:23 horas, respectivamente.
Los eclipses totales se dan porque en algún momento de su movimiento de traslación la luna cruza justo en la línea que une a la tierra con el sol y empieza a ocultarlo hasta que llega un momento en que se produce este evento espectacular del eclipse total y se puede distinguir la llamada corona del sol, que es prácticamente la parte más externa de su atmósfera.
González Samaniego explicó que la sincronía o alineación entre los tres cuerpos es lo que permite estos fenómenos espectaculares; sin embargo, “sabemos que va a llegar un momento en que la luna va a estar suficientemente alejada de la tierra, de tal modo que ya no habrá eclipses en la tierra, aunque para eso faltan algunos miles de millones de años”.
Para observar en condiciones seguras el eclipse, el investigador recordó que “nunca es recomendable ver al sol en forma directa, porque podemos dañar nuestra retina y quedarnos ciegos”. Existen otras tácticas de mirar de manera indirecta y protegida, por ejemplo, haciendo un orificio en una cartulina y proyectar la sombra en otra superficie como papel u otro material.
A través de las separaciones que existen en las hojas de los árboles, pues los resquicios por donde pasa la luz solar actúan como proyectores estenopeicos y, por tanto, se puede advertir el paso del eclipse.
Pueden utilizarse películas especiales capaces de filtrar 99.9 por ciento de los fotones provenientes del sol y usar telescopios si sólo se tienen filtros especiales, de lo contrario resultan mucho más peligrosos para los ojos. No se deben usar lentes oscuros porque no filtran la cantidad suficiente de fotones y si se emplean caretas de soldador, éstas deben ser de grado 14.
Debido a la relevancia del evento la Dirección de Comunicación del Conocimiento tiene previsto celebrar una serie de actividades en las diferentes unidades de la UAM y Rectoría General, de divulgación con la impartición de conferencias, talleres, observaciones del sol con telescopio, así como la entrega de lentes certificados a los integrantes de la comunidad universitaria participante.
La siguiente fecha programada para efectuar estas actividades será el 7 de febrero en la Unidad Cuajimalpa. Después, el 22 de febrero se llevará a cabo en Rectoría General, para el 7 de marzo en la Unidad Azcapotzalco, el 20 de marzo en las instalaciones de Xochimilco, para finalizar el 4 de abril en la UAM Iztapalapa.
El doctor Mario De Leo Winkler, director de Comunicación del Conocimiento, dijo que la importancia de difundir información a través de estas actividades es, en primera instancia, cuidar la vista de la colectividad y saber cómo hacerlo en forma segura.
Además, es necesario que las personas cuenten con referencias básicas de qué es un eclipse, cuándo ocurrirá, cómo mirarlo en México y las sugerencias que pueden hacerles para verlo de manera adecuada, ya que el siguiente eclipse total de sol se percibirá en México hasta dentro de 28 años.