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MORELIA, Mich., 14 de mayo de 2018.- Este domingo Morelia fue testigo de la gira por los 30 años de la banda de Folk Metal, Mago de Oz, con un lleno casi total del Palacio del Arte, evento que congregó a niños, jóvenes, padres de familia y hasta adultos de la tercera edad.
Desde mediodía, los alrededores de esta plaza diseñada para realizar corridas de toros, fueron inundados de seguidores de la banda, todos vestidos de negro, comenzaron a congregarse en la entrada principal. Mientras algunos se quedaban haciendo fila, otros eran los encomendados de ir a Soriana a comprar víveres para aguantar la espera, regresando con bolsas de frituras, cervezas y hasta botellas con todo y el servicio.
Una lluvia momentánea no ahuyentó a nadie a pesar de que el sábado se había cancelado el concierto de la banda por una fuerte precipitación, lo que hizo fue que se calentaran los ánimos y en el estacionamiento de la plaza comercial empezaron a llegar camiones, camionetas y motocicletas.
Ya a las 19 horas, los botes de basura estaban llenos, las filas interminables en las cajas de Soriana, muchos aún seguían en la banqueta cheleando con los cuates, las filas se fueron difuminando y se hacían círculos alrededor del celular de alguno que ponía desde los clásicos hasta las canciones más conocidas.
Una hora después se empezaron a escuchar los ensayos de la banda, lo que prendió a la raza nuevamente y acercándose la hora de entrada las filas se volvieron a hacer, por todos lados se escuchaba “¿wey esta fila es para grada?”, pero nadie sabía a ciencia cierta que fila era para cuál lugar.
Las barreras de edad, si conocías o no a los que estaban a tu alrededor, se fueron desapareciendo y mientras se seguían formando no faltaba el que te ofreciera una chela o unas papas, ya todos estaban en una misma sintonía.
Se dieron las 21 horas, las puertas aún sin abrirse y muchos aún se preguntaban si estaban en la fila correcta, eso siguió durante casi una hora y en el momento que se abrieron las puertas algunos se separaban de sus grupos, para investigar, regresando corriendo para decirle a sus cuates “wey ya están entrando los de barrera, estamos en la fila de ruedo”.
De inmediato las filas se rehicieron, y poco a poco fueron entrando los amantes del metal al recinto, pocos minutos pasaron cuando se apagaron las luces e inició la fiesta, todo en un caos ordenado.
Luego de que Txus, arribara al templete alzando una bandera de México, tras un breve silencio, Molinos de Viento fue lo primero que se escuchó al entrar el resto de la banda, seguida de clásicos como Alma y el País de la Luna Oscura, “Vamos Morelia, esta es su fiesta” gritaba el vocalista mientras las luces de las pantallas de celulares se veían por todos lados.
Ahí Javier Domínguez Gregorio, mejor conocido como Z, dejó de cantar para agradecer a los seguidores por 30 años de permitir que el sueño de la banda continúe, momento en él que recordó que de esas tres décadas el lleva entre cinco o seis años, ya que entró a la salida del legendario fundador José Andrea.
En ese momento empezaron a tocar H2Oz, una canción que claramente es un mensaje sarcástico al ex vocalista y donde la banda le die “que te vaya bonito, nos veremos en un bar”.
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