Economía en sentido contrario: Banamex
Miscelánea, salud y política
Lo que las mujeres aún tienen que
aprender es que nadie te da poder.
Simplemente hay que tomarlo:Roseanne
Barr
Vencer el machismo, la misoginia, la violencia contra la mujer es una labor ardua que requiere del trabajo conjunto de todos los protagonistas que inciden en políticas públicas, educativas, en la investigación docente y el trabajo social, la integración familiar, los derechos laborales y reproductivos, la seguridad social, la prevención y sanción del delito, atención de violencia de género, instancias infantiles, derechos de los infantes, etcétera.
El gobierno y la sociedad civil organizada han avanzado en las últimas décadas, pero aún es insuficiente para garantizar igualdad y equidad entre géneros, todavía se mantiene un vasto territorio nacional bajo la realidad de una lacerante violencia, caracterizada por feminicidios, desapariciones forzadas, prostitución, secuestro, abuso de poder, violaciones, hostigamiento, discriminación y otros delitos bajo el manto de la casi total impunidad.
De ahí que la mayor demanda de este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, sea exigir al gobierno federal y de los estados trabajen de forma incansable por JUSTICIA para las mujeres: ¡Ya basta! ¡Ni una más asesinada! ¡Ni una más violada! ¡Ni una más desaparecida! ¡Ni una más secuestrada! ¡No a la impunidad! ¡No a la pasividad gubernamental!
Es tanta la falta de acciones de gobierno para contener la marea sangrienta que enluta al país, que muchos son los colectivos y agrupaciones que emergen y se multiplican como nuevos protagonistas de luchas sociales para subsanar la pasividad cómplice de las autoridades frente a la creciente delincuencia, y el dolor que lastima a su familia.
Una de ellas, Delia Quiroa, de Madres Buscadoras 10 de marzo, al ser entrevistada anoche en Imagen TV, aplaudió la efectividad del operativo para localizar a cuatro estadounidenses que fueron privados de la libertad en Matamoros, Tamaulipas, tres días antes. Pero lamentó que las autoridades –Guardia Nacional militar, marinos, policías– no hagan el mismo trabajo para encontrar a más de 140 mil desaparecidos en México, 12 mil de ellos en esa entidad.
Otro caso mediático que ejemplifica el machismo imperante y la impunidad fue el ocurrido el sábado 4 de febrero, en vísperas de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, indignó la grabación que muestra a una cantante que es agredida por un corpulento afroamericano quien le toca la vagina, ella le tira una cachetada sin acertar, él la golpea en la cara, la tira del cabello y arrastra en medio de una barahúnda.
La víctima, con cuello ortopédico, visiblemente afectada dio una entrevista al otro día, su nombre: Heidy Infante, nieta del ídolo popular de Huamuchil, Sinaloa. Contó que ella y su grupo participaban en el evento musical del Mercado Escuadrón 201, alcaldía Iztapalapa, cuando Yian López Semanat, un afrocubano sin invitación alguna irrumpió en el escenario, él le toca la cabeza, ella le toca la espalda y le pide que se baje, como respuesta él la agrede sexual y físicamente, pese a ello, la policía de la ciudad de México dejó libre el agresor.
Mucho se debe trabajar para capacitar a los elementos policiacos de las Secretarías de Seguridad Pública Federal y estatales para que actuén en el marco de la ley y puedan atrapar a los delincuentes y proteger los derechos de las víctimas.
Y más allá, bien harían desde el gobierno en impulsar desde la SEP y escuelas privadas cursos educativos desde la escuela primaria sobre esos temas, en lugar de querer incluir en los libros de texto gratuito fondos ideologizantes, debería ser su objetivo divulgar el respeto a los derechos humanos para lograr una sana convivencia entre géneros.
Otra idea es que en lugar de secuestrar el Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano (SPR), y convertirlo en aparato propagandístico, aplaudidor de los despropósitos del presidente de la República, mejor sería usar esas radiodifusoras y televisoras, pagadas con recursos públicos, a divulgar contenidos inteligentes, reflexivos y alentadores para practicar una cultura cívica que fortalezca a la buena comunidad.
Además, es necesario incluir temas sobre la necesidad de respetar nuestras conquistas, como el régimen constitucional existente, nuestra democracia, propuestas para ejercer los derechos individuales y sociales y las libertades de pensamiento y de expresión, entre otros valores.
Muchos dirán que eso de convertir a los medios del Estado en medios al servicio del gobierno ya ocurría desde décadas atrás, es cierto parcialmente, nunca con el sesgo reduccionista y confrontacional que promueven los voceros del cuatroteísmo con miras a cumplir los deseos de su líder y mantenerse en el poder.
Siendo objetiva, pese al apoyo que recibió como candidato de los grupos feministas, el presidente Andrés Manuel López Obrador no ha podido ser empático con la lucha de las mujeres que reclaman respeto a sus derechos humanos, acceso a la justicia, el cese de la violencia feminicida y homicida, y frenar las desapariciones, así como apoyar la búsqueda de sus desaparecidos
Sólo una recomendación: tengamos memoria, están por regresar al escenario político las promesas de campaña electoral, pero hay que recordar que él no cumplió con lo ofrecido antes de 2018, no fue ni es capaz de comprender las manifestaciones de protesta, menos aún el dolor de las mujeres vulneradas.
Quizá por ello, emociona que haya una presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la ministra Norma Piña se haya solidarizado hoy al reclamo legítimo de las mujeres y demande un «alto a las violencias”, que reconozca las deudas históricas del sistema de justicia frente a las mujeres y considere impostergable detener la discriminación y violencias por razón de género.
La valentía y congruencia que hasta ahora ha mostrado la presidenta de la Suprema Corte son valores encomiables, tanto como son condenables los arteros ataques en contra de quien no se subordina al voluntarismo del mesías tropical, y por ello le enviaron a la sede de la SCJN un ente disfrazado de mujer para proferir ofensas de género e injurias en su contra.
Eso no se vale, se debe investigar y castigar a los responsables de este hecho bochornoso que busca debilitar a la ministra presidenta. Nuestros ojos están puestos en la votación de la SCJN que restablezca la vigencia de la legislación electoral constitucional para los comicios del 2024.
Vivimos momentos preocupantes, en que requerimos de unidad nacional y de la mayor inteligencia gubernamental para delinear una estrategia para combatir a los grupos delincuenciales que asolan a la mayor parte del país y secuestran a visitantes extranjeros.
Claro, si realmente se quiere detener una intervención militar extranjera, a menos que la decisión sea someternos por incompetencia.
Soberanía en Riego
Hay evidencias insoslayables de que el Estado mexicano ha perdido el control en amplias zonas del país, controladas de facto por el crimen organizado ligado al narcotráfico, y que en entidades fronterizas, como Tamaulipas, se vive violencia sin límite.
No solamente ya juzgaron extraterritorialmente a un exsecretario de seguridad pública, ahora un exfiscal de Estados Unidos, William Barr, acusa a AMLO de ser el “facilitador en jefe de los cárteles mexicanos” y explica que ante la inacción por parte de su gobierno, se requiere del liderazgo estadounidense para ayudar a México.
Mientras el mandatario mexicano ocupa tiempo y esfuerzos en desmantelar al INE, minar la credibilidad del Poder Judicial y poner en entredicho la claridad del próximo proceso electoral con la elección de consejeros «a modo», entre otros afanes autoritarios, el exfiscal de Donald Trump argumenta que la intervención sería para combatir como terroristas a los cárteles de droga, y adelanta que esa operación militar en territorio mexicano sería para “degradar a los cárteles mexicanos hasta el punto que México ya los pueda mantener bajo control”.
El presidente López Obrador informó que mañana se reunirá con la asesora de La Casa Blanca para hablar sobre el fentanilo y armamento, veamos con mucha atención en qué términos se desarrolla este encuentro y los posibles acuerdos.