El pleito eterno: política vs brevedad
OAXACA, Oax., 8 de julio de 2017.- “Como sociedad seguimos enterrando a Oaxaca”. Y Raúl Ruiz Robles vuelve a la carga. El presidente de la tristemente famosa Coparmex en Oaxaca, habla en nombre del empresariado que le queda.
Leo una entrevista que hicieron en un medio local y percibo (no me adueño de la verdad absoluta) un rosario de lugares comunes, sin fundamento y con el único afán, así lo interpreto), de intentar posicionar en la mente de los lectores, una realidad que no sustenta y de la que no quiere salir, cuya urdimbre son falacias, que ha venido repitiendo en un medio que se edita en la Ciudad de México, las últimas semanas mientras asiste a eventos y se toma la foto al lado del principal y caso exclusivo blanco de sus obuses.
Pareciera una lista de lamentaciones de 2015 o 2016, cuando no hacían falta argumentos y números para sustentar sus aseveraciones.
Al margen de que la imparcialidad no existe, no está en mi ánimo defender personas o posturas algunas. Solo intento hacer ver que sus “declaraciones”impidieron que la nota de Carlos, fuera nota.
¿Qué informa? ¿Cuáles son sus argumentos? ¿Cuál sus respuestas a los cuestionamientos? ¿Su finalidad? ¿Su intencionalidad? ¿Su destinatario?
“¿Pérdidas?”. Si ni siquiera lo han ganado. No se pierde lo que no se ha ganado.
Irresponsable, se me revela un llamado a los medios, para hacer una crítica sin argumentos, sin fundamentos, sin cifras. Viniendo de la que fuera la otrora más importante organización empresarial en Oaxaca, resulta grave y huele a Chantaje.
Ya lo escribimos en este mismo espacio. No es mala la crítica, pero solo cuando viene acompañada de propuestas de solución.
Está nota no fue nota; y no por culpa del reportero, que hizo grandes esfuerzos para intentar redactar un producto de calidad. Pero como en el fútbol: pasas un buen balón y te devuelven una sandía.
Coparmex Oaxaca se asumió como sociedad. Los queremos ver en el Tequio de este sábado.
Y en su próxima conferencia de prensa, con sus quejas, apegadas a la ley y sus cifras contrastadas con las oficiales de la Federación, Entidades Federativas y Municipios; y sus malestares acompañados de propuestas de solución.
Acuérdese: un problema, dos soluciones.
La libertad de asociación y expresión exigen, mínimamente, veracidad y responsabilidad; y no el cobre que se saca cuando se cree que la ciudadanía tiene la ciega obligación de creer.
Sofismas que van contra Oaxaca, contra su ruta de prosperidad, contra la verdad de las inversiones y obra pública; contra una repentina nueva realidad que contrasta con la que nos dejaron los que se están yendo a la cárcel.
O que de plano los socios de coparmex elijan un vocero responsable, que declare lo que consensuadamente se decida.
¿O será que Coparmex Oaxaca, sé quedó sin socios?
Reitero; y tómese un minuto para pensarlo.
Lo que aquí defiendo no es una institución, una persona o un grupo. Aquí defiendo mi verdad, que puede no ser la tuya y que se construye con argumentos y contrastes y no con afirmaciones “a priori” que nos dejan mal parados por quienes se supone debían ser portavoces de solidaridad y amor al terruño y no de despresrigiantes acusaciones hacia un estado que nos necesita a todos: Gobiernos y Sociedad.
Aquí no debe caber la política. Como expertos en el ramo empresarial, sentarse con los involucrados (todos) y regalarnos un plan; Soluciones, no pujidos, ni falacias. Mucho menos dobles juegos contra quien en ejercicio de su investidura tiene que actuar con mesura y sin distracciones.
Un plan que parta de verdades y que deje claro quienes están con el oro de la verdad y quienes, de entre todos los implicados, con el cobre de la mentira.
@MoisesMolina
Facebook: Moisés.Molina.Reyes.