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Presenta Senado a inversionistas plan del corredor del Istmo
OAXACA, Oax., 17 de enero de 2017.- La inoperatividad de la Secretaría General de Gobierno en Oaxaca ha sido notoria en protestas como la de pobladores de San Raymundo Jalpan, quienes tuvieron que patear las puertas de Palacio de Gobierno para lograr una audiencia este martes.
Lejos del discurso de puertas abiertas, los responsables corren y cierran la puerta de Palacio de Gobierno, como hicieron en días pasados con activistas de la Liga Mexicana para la Defensa de los Derechos Humanos (Limedh).
A mes y medio, los pasillos del Palacio de Gobierno siguen ocupados por supuestos desplazados de la región triqui, que habitan en condiciones deplorables en medio de basura y acumulan objetos en forma insalubre.
Este martes, un grupo de pobladores de San Raymundo Jalpan protestó por la decisión del Tribunal Electoral de anular su elección, asunto que está en manos de la Secretaría General de Gobierno.
Llegaron en marcha después de bloquear calles y afectar a terceros, pero lejos de ser atendidos, les cerraron la puerta.
Después del escándalo, personal administrativo del gobierno de Oaxaca acudió para hablar con los inconformes y ofrecerles el ingreso de una comisión.
Los guardias se resguardaron al interior del recinto al notar la presencia de este grupo, que derribó las vallas y pateó las puertas para ser recibido.
En contrario, el grupo de los ex braceros que habían protestado pacíficamente durante horas frente a Palacio de Gobierno para pedir sus pagos, fueron ignorados.
La Secretaría General de Gobierno en Oaxaca tiene un presupuesto de más de 400 millones de pesos, pero aún con una plantilla de funcionarios, ninguno atiende estos casos que derivan en actos violentos y afectan a la población en Oaxaca.