
México cambiará para siempre el uno de junio
CIUDAD DE MÉXICO, 10 de agosto de 2018.- Pablo Hiriart tituló su columna del martes pasado (El Financiero) “Bejarano regresa a las grandes ligas”, y con esa pura frase de golpe y porrazo volvieron las imágenes que muchos mexicanos no desean que regresen a la Realpolitik de México.
Es por demás conocido el episodio pero vale refrescar la memoria, fue el día 3 de marzo de 2004 cuando se hizo público el famoso video. Fue en una entrevista que le hacía “Brozo” (personaje de Víctor Trujillo, y cabe recordar que Bejarano venía saliendo de una entrevista previa con Adela Micha y Leonardo Kourchenko en lo que era el noticiero estelar de Televisa) cuando de manera sorpresiva se transmitió en cadena nacional la imagen donde se podía distinguir al entrevistado recibiendo fajos de billetes con todo y ligas.
Para inicios de noviembre de ese mismo año, Bejarano fue desaforado como diputado local y una semana después ingresó al Reclusorio Sur, acusado de uso de recursos de procedencia ilícita y lavado de dinero, cargos por los que fue absuelto el 6 de julio de 2005.
De allí que desde ese entonces se le conociera con el mote de “El señor de las ligas”, pero más allá del nombre o el apodo, Bejarano siguió con su labor política, de lo que se conoce como un “operador político”, pues manejaba grupos de poder, por ejemplo, diputados locales o federales, quienes más que rendir cuentas a sus votantes o a su fuerza política, se las rendían al personaje.
Sus fortalezas: la paciencia, la operación y la perseverancia, sumada al empuje de su esposa Dolores Padierna, desde los espacios donde se expandían, lograron que su regreso a las querencias de López Obrador fuera de manera casi natural, si es que en algún momento hubo alejamiento.
El otro personaje que también ha sido puesto en el escarnio público es Manuel Bartlett, su pasado priista lo delata, sus acciones en la memoria colectiva nacional son imborrables, y cualquier espacio que se le cediera sería criticable, tal como sucedió con la Dirección d ela Comisión Federal de Electricidad.
El caso es que ellos dos, junto con los demás que está promoviendo el presidente ya electo (le falta tomar protesta para ser Constitucional) ya empiezan a jugar un papel en el escenario de la vida pública, y tal vez, no descartemos la idea, de que estos dos al menos sirvan para lo que en el futbol se conoce como “jalar la marca”, esto es, que los negativos de ellos logran llevarse los pocos o muchos que empiezan a generar las decisiones de AMLO, y de esa forma al presidente no lo toque ni el pétalo de una crítica.
Si las cosas se llegaran a complicar, el cambiarlos o relevarlos hablaría bien del Presidente y hasta lo dejaría bien parado y de nueva cuenta no mancharía su inmaculado traje, como al parecer no lo manchó cuando Bejarano se convirtió en el hombre de las ligas (junto con otros escándalos locales de la época), esto es, la fórmula ya está probada y no tendría por qué fallar pues el bono de la luna de miel sigue siendo suficiente, aunque el desgaste ya se nota en varios frentes.
@rvargaspasaye