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OAXACA, Oax., 4 de septiembre de 2017.- El instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) delegación Oaxaca, indicó que una buena alimentación es fundamental en cada una de las etapas de nuestra vida desde la infancia hasta la vejez. Los aspectos básicos de una dieta son los mismos a lo largo de nuestra vida, pero las necesidades nutricionales individuales cambian a medida que vamos envejeciendo.
En un comunicado se informó que a medida que envejecemos comenzamos a presentar cambios corporales, lo que hace necesario reorientar nuestro estilo de vida para evitar la aparición de alteraciones metabólicas así como alimentarias.
La coordinadora delegacional de Nutrición del IMSS, Rocío Guadalupe Espinosa Castro, dijo que durante esta etapa de la vida, el apetito así como la cantidad de alimentos ingeridos tiende a declinar, además de la preferencia por comidas con bajo valor nutrimental o energético (caldos, atole de agua, verduras muy cocidas), por lo que se debe tener especial cuidado ingerir una dieta que contenga todos los nutrientes.
Entre las recomendaciones generales a seguir destaca el evitar alimentos con pocos nutrientes como azúcar de mesa y harinas refinadas, el exceso de hidratos de carbono simples, pues pueden producir hiperglucemia, incluir multivitaminas, calcio, vitaminas D, B y ácido fólico.
La nutrióloga del IMSS recomienda el consumo diario de fibra para mejorar el movimiento del tubo digestivo, así como tomar abundantes líquidos y realizar 30 minutos de ejercicio, cabe señalar que en el Centro de Seguridad Social del IMSS (CSS), se ofrecen cursos ocupacionales para adultos mayores con la finalidad de fomentar la salud de manera integral.
Debemos tener en cuenta que enfermedades crónico degenerativas (obesidad, padecimientos del corazón; hipertensión arterial, gota, diabetes y osteoporosis) están relacionadas con una alimentación desequilibrada y la falta de actividad física, sin embargo existen alternativas para cada caso como las dietas de reducción, bajas en colesterol y azúcares, las ricas en fibra y agua, las bajas en sal así como las bajas en purinas y vísceras. Destacó Espinosa Castro.
Finalmente indica que cada persona es diferente, por lo que es recomendable que se consulte primero con su médico, cuáles son sus requerimientos alimenticios para su caso en particular tomando en cuenta su edad, estado de salud y la actividad que realiza diariamente.