Economía en sentido contrario: Banamex
Estamos experimentando en México una caudal de hechos y acontecimientos que nos dislocan cada día más de tal manera que poco sabemos de lo que puede suceder en unos días más en que una administración diferente se hará cargo del bien común y que en el propio dicho de la presidenta electa, será la continuidad de lo que sus acompañantes tanto en el gabinete que hasta ahora ha anunciado, el ejecutivo saliente y la mayoría de los votantes que la eligieron ha dado más resultados favorables que negativos a los problemas y demandas que encaran las y los mexicanos como son la inseguridad, los crímenes destacadamente los feminicidios, el avance y extorsión del crimen organizado, la pobreza en sus dos diferentes modalidades más oprobiosas, los servicios de salud, la educación oficial, el deterioro del medio ambiente y recientemente la cada vez más peligrosa y estratégica escasez del agua, así como el destino de los desechos de todo tipo. A pesar que en todas las administraciones la presentación de resultados y estadísticas son elaborados y presentados siempre a favor de los gobiernos, basta ahora mencionar que de acuerdo con esas mismas estadísticas oficiales ahora sabemos que en los cinco años y nueve meses que han transcurrido de la presente, los índices de estos problemas y demandas han sido debajo de los obtenidos en los últimos cinco sexenios anteriores resaltando la declaración del ejecutivo actual que tenemos un problema importante en la economía no solo en el déficit gubernamental, sino en el crecimiento del PIB, la inversión privada local y extranjera y como los especialistas locales e internacionales lo han señalado, la inversión extranjera directa ha sido la menor en los últimos años y se ha reflejado en su mayoría en la expansión de inversiones ya existentes quedando como una exageración mediática la relocalización de empresas por el conflicto comercial entre China y los Estados Unidos con singular relevancia en el espejismo que hasta ahora han construido sobre el Interoceánico que ahora mismo podemos enterarnos de dos notas que comparten espacios en los medios en que por un lado el hasta hace poco alineado presidente de los empresarios dice que ese proyecto podría, en el tiempo favorito de conjugación mexicano, crear más de un millón de empleos en los próximos treinta años y el dirigente del instituto mexicano de la competenciaasevera que no hay las condiciones mínimas en el Istmo y el sureste para la relocalización y/o el establecimiento de empresas de envergadura como son la certeza jurídica, agua, gas industrial, electricidad suficiente y proveedurías que cada vez más sectores de inversionistas, certificadoras, bancos y especialistas locales y extranjeros a los que recién se suman los gobiernos de Estados Unidos y Canadá añaden a los problemas que crearía la mencionada reforma judicial.
El paso que no huelga del personal del poder judicial federal incluyendo jueces y magistrados, la iniciativa de ley latente para desaparecer a órganos autónomos que han jugado un papel en los últimos años trascendental para tener información oficial a la mano, conocer el manejo inadecuado y corruptelas de los servidores públicos de al menos los últimos tres sexenios entre otros temas torales, la iniciativa para reformar al poder judicial son asuntos que mantienen la atención nacional en vilo en que una vez más el clima de polarización social y política que hemos acrecentado en los últimos años los empeora y radicaliza. Las posiciones de los dos Presidentes actuales, el que está en funciones a 37 día de terminar su periodo y la electa a los mismos días de tomar posesión, sobre estos temas también pareciera que inician con formas de enfoque diferentes y terminan operándose como fueron propuestos y enfocados, en una bipolaridad de poder que está dando también mayor complejidad al clima político y social que enfrentamos.
Como si algo faltara en nuestro solar no nos quedamos atrás en contribuir a esta situación delicada,sino que pareciera que nos hemos contagiado con la pequeña ayuda de nuestros enemigos y baste mencionar al representante de mayor envergadura deuna iglesia que exhibiendo su gran conocimiento, antidiscriminación y amor por sus prójimos espetó desde su pulpito en días pasados sobre lo que considera un problema religioso “aquí en un pueblo, nos gobernamos por usos y costumbres y aquí vivimos puros católicos. Y alguien ay dios ¿en el siglo veintiuno con esas actitudes, dios estará de acuerdo? Dios no está de acuerdo” Deus ex Machina dixit. Este negro panorama pareciera como dice el librito en el 18 Brumario: La historia primero es tragedia y luego una comedia o también como dijo la tía del gran Ibargüengoitia el autor de la obra que da título a esta colaboración: La vida quiso que fuera desgraciada, pero no me dio la gana.
Gerardo Garfias Ruiz