
Exterminio
(Aforismos)
• Es complicado ser sabio• Veo el horario de clases: materias, días horas; la disposición horaria aclara el panorama: materias, días horas. Puedo jugar, volver a hacer la mezcla, alterar el orden me permitirá hacer las horas de mi propia vida: Arte Indígena, Renacimiento, Coloquio Semestral, Historiografía. Técnicas de investigación.• El conocimiento es de los jóvenes, mis profesores -gente bastante joven: Maestros y Doctores en Ciencias.• Con el horario de clases puedo afirmar: sé mi carga de trabajo, ningún resfriado podrá detenerme.• ¿Por qué será que al conocer el horario recuerdo el olor de la comida que hacía mi madre?• Sé el horario para el semestre de Historia del Arte cuando me llegan noticias del reino del crimen: los saberes del hombre resultan mínimos ante su presente.• Antes de cumplir los sesenta años, digo: ¿será moderno ser estudiante de Historia del Arte?• Lo común en el tiempo de necesidades es abandonar los estudios; resiste, no eres gente común.• Veo el horario de clases, me parece contemplar la continuación de un grato sueño.• En la mañana del domingo recordé a mi amigo Eusebio Ruvalcaba; ¿por qué los domingos de febrero me traen el recuerdo de mis muertos?• Veo el horario de clases, me detengo, caigo en esto:estudiar es simple, sólo se trata de ver; de alguna manera el ser humano, su cerebro, tiene la capacidad de mirar y contemplar en la imagen la imagen del futuro; ese mirar emociona.• Vemos y olvidamos; olvidamos y volvemos a ver, al hacerlo relacionamos la experiencia de distinta forma; ahí, en ese cambio de relación está la experiencia del vivir.• Veo materias, nombres de profesores, contemplo un sueño; una voz estricta me pregunta: ¿ya pagaste la inscripción?• Saldré del horario de clase como de un sueño: con nostalgia del pasado.• Estudio para tener algo que recordar; discreta forma de resistencia.• A mis maestros y compañeros de grupo ninguna vez en mi vida los he visto de forma presencial; estudio entrefantasmas.• Regreso a J. Kristeva, El lenguaje, ese extraño desconocido; salgo convencido que en algún momento de la especie humana fue vidente, pero perdimos la capacidad de ver más allá de aquello que llamamos “real”. Nos llenamos de miedos. Aunque de tarde en tarde nos defendemos; pienso en el amor: amamos lo desconocido o a la persona que recién hemos conocido y algo en nuestro ser nos conduce a un tiempo remoto.• Tarde nublada; febrero loco, decía mi madre; mi madre, que hablaba de lo práctico, yo hablo de sueños.