Bloquean vecinos de la Gómez Sandoval por obra inconclusa
OAXACA, Oax., 9 de marzo de 2017.- La edad para que los hijos acompañen a sus madres en situación de reclusión es ahora de 3 años, después los infantes tendrán que ser llevados con sus familiares, o en su caso, a una casa hogar. En el Centro de Readaptación Social (Cereso) femenil de Tanivet, ubicado en Tlacolula, viven 11 menores de edad con sus madres y hay dos mujeres embarazadas. Juan José Rodríguez Molina, director general de reinserción social, explicó que por ley, solo hasta los tres años podrán vivir con sus madres. Diego es el mayor de los menores en el penal de Tanivet. Padece de parálisis cerebral y tiene una hermana, que vive en el albergue ubicado frente al reclusorio, Gabriela Cruz, su madre, quien ha padecido el encierro y el olvido de su pareja, quien un día desapareció. Dasha no tiene noción del sitio dónde vive su primera infancia. En sus primeros cuatro meses ha compartido la prisión con su madre, Aleida, una mujer que es originaria de Monterrey y que recibe ocasionalmente la visita de sus familiares. La reducción en la edad para estar con sus madres en el penal es debido, entre otros argumentos, para que los niños puedan vivir su infancia, sin la complejidad del encierro. Sin embargo, durante el tiempo que permanecen dentro no conviven entre sí. En su mayoría, el tiempo lo pasan al lado de sus madres. En Tanivet, la población infantil es mínima. Solo 11 menores para una comunidad de 244 internas, entre sentenciadas y procesadas, del fuero común y del fuero federal.