Padre Marcelo Pérez: sacerdote indígena, luchador y defensor del pueblo
CIUDAD DE MÉXICO, 20 de junio de 2016.-
1.- La prolongación y agudización del conflicto magisterial, y la incorporación de otros sectores de la sociedad en apoyo a su lucha, así como las tensiones sociales y políticas que han provocado las movilizaciones, bloqueos carreteros, actos vandálicos y la violencia oficial que se han registrado en las regiones de los valles centrales, el istmo, la costa y la mixteca, de manera preponderante, han configurado un escenario similar al que nuestra entidad vivió en el 2006. Solo que, a diferencia de lo ocurrió hace una década, aunque ahora los maestros y sus aliados no están pidiendo la renuncia del jefe del poder ejecutivo ni la desaparición de poderes, tal pareciera que el gobernador Gabino Cué así lo está asumiendo al abdicar, de facto, a ejercer sus facultades constitucionales y ausentarse física y políticamente del Palacio de Gobierno para resolver, o coadyuvar, a la solución de un conflicto que está colapsando social y económicamente a la entidad.
2. Estamos ya frente a un escenario de ingobernabilidad propiciado tanto por la razón de Estado que esgrime el gobierno federal para negarse al diálogo con la CNTE (y su expresión local la sección 22 del SNTE) y seguirle apostando al uso desproporcionado de la fuerza pública (Salina Cruz, como el caso más crítico hasta ahora) , como por algunos métodos de lucha del magisterio y sus aliados que, como el caso de los bloqueos carreteros, no solamente vulneran los derechos ciudadanos sino que están provocando, de nueva cuenta, desencuentros y crispaciones entre los oaxaqueños y oaxaqueños .
3. Cuando los poderes constitucionales son rebasados por los poderes fácticos, o quienes encabezan y/o forman parte de estos poderes abdican del ejercicio de sus funciones, abren paso a un vacío de poder. Así, entre la ingobernabilidad y el vacío de poder hay un solo paso y eso es lo que se está viviendo en Oaxaca cuando el gobernador Cué prefiere cumplir fiel y patrióticamente con su papel de presidente de esa entelequia llamada CONAGO que estar atento a lo que día tras día viene ocurriendo en su entidad que debe seguir gobernando hasta el 30 de noviembre de este año, al menos que otra sea ya su determinación.
4. Lo más grave de todo es que tampoco los partidos políticos, cuyos candidatos a cargos de elección popular se desgañitaron ofreciendo fórmulas mágicas para devolverle a Oaxaca paz, progreso y gobernabilidad, hoy , con excepción de Morena y legisladores federales del PRD, las dirigencias estatales del propio PRD, PAN, PT y demás partidos políticos, han preferido callar ante un asunto de evidente interés público que debiera llamar la atención de todas las autoridades, dirigentes políticos y sociales de la entidad pues estamos ante una crisis política que de prolongarse puede derivar en mayor violencia e ingobernabilidad.
5. A la gran mayoría de la sociedad provoca malestar e irritación los bloqueos carreteros porque se trata de una medida extrema del magisterio y otros actores como son los padres de familia, organizaciones sociales y diversos grupos de trabajadores del campo y las ciudades de la entidad y que hoy se han unido a la causa magisterial para presionar a los gobiernos federal y estatal. Pero también tiene el mismo efecto, y tal vez de mayor magnitud, como se está expresando con un movimiento social en ascenso, la brutal ofensiva instrumentada por el gobierno federal (con el silencio cómplice del gobierno estatal) para intentar aplastar a la disidencia magisterial de Oaxaca. Es una batalla desigual que se viene librando desde hace meses y que hoy está en su punto definitorio: o hay diálogo y el gobierno federal acepta que ya ni el SNTE están de acuerdo con la reforma educativa por lo que hay que buscar otras salidas institucionales, o se sigue en la ruta de pretender imponer a base de despidos, encarcelamientos, toletazos y gases lacrimógenos una reforma que nació muerta.
Twitter: @YescasIsidoro