4T en marcha: Aprender y prevenir

Raúl Ávila Ortiz | Oaxaqueñología

OAXACA, Oax., 16 de junio de 2019.- Los estrategas de la 4T deberán extraer y procesar aprendizajes valiosos para prevenir futuras amenazas a la estabilidad del país como la que ha formulado el presidente Donald Trump al trocar, en una primera etapa, migración por aranceles.

Así, por ejemplo:

No olvidar que la historia moderna de México y América Latina está estrechamente asociada a la de los Estados Unidos y que una transformación de la vida pública como la que se está planteando tendrá en el vecino del Norte un actor interviniente siempre interesado.

Ponderar que las expresiones públicas del Presidente López Obrador cobran impacto de inmediato en el entorno y a favor o en contra de su propia agenda en un mundo como nunca comunicado de manera instantánea.

Advertir que si bien la «necia realidad» de los déficits sociales heredados del ciclo económico neoliberal funciona como amortiguador en contra de la obcecación neoliberal, la reincidencia en errores en la toma de decisiones presidenciales y los disensos dentro del gabinete irá desgastando la credibilidad del líder y su proyecto.

Acompañar al discurso político y social con la argumentación constitucional y la defensa del Estado de Derecho democrático en cuyo subsuelo residen los derechos fundamentales, individuales y sociales, de todos los habitantes del país a los que se debe la nueva estrategia de gobierno.

Precisar que no es la ley lo que está en juego, sino la constitución democrática y la democracia constitucional, especialmente con la aprobación del T-MEC.

Avanzar en las tesis del constitucionalismo garantista multinivel y aprovechar la ocasión para promover la creación de instituciones subregionales (Triángulo Norte, México y Norteamérica)  e intra-regionales (los Estados del Sur de México y los de la Frontera Norte) para gestionar crisis multifactoriales como la que ha provocado la oleada migratoria.

Afinar el dibujo de los escenarios de corto, mediano y largo plazos porque la campaña presidencial en los Estados Unidos será larga y compleja; las tentaciones de su presidente candidato para tomar de rehén a México enormes, y  la agenda mexicana cargada de temas y problemas acumulados, las tendencias económicas inciertas y más bien adversas, y los recursos disponibles escasos.

Modular la austeridad republicana que por momentos es desproporcionada a las urgencias que brotan por doquier, pero sobre todo en los temas de mayor sensibilidad social.

Gobernar es prever y prevenir es aprender para anticiparse al menor costo posible. La legitimidad no es gratuita.