Bloquean vecinos de la Gómez Sandoval por obra inconclusa
Oaxaca, Oax. 3 de julio de 2010 (Quadratín).- El infarto es la causa de muerte más frecuente en hombres mayores a los 40 años de edad, ante ello los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), exhortan a la población a realizarse revisiones periódicas, además de practicar estilos de vida saludables, con el fin de disminuir el riesgo de presentar esta afección.
En entrevista, la jefa del departamento de Enfermedades no Trasmisibles de la institución, Irene Cortes Carrillo, informó que más del 30 por ciento de los mexicanos tienen riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.
Y es que sólo la mitad de las personas que sufren un ataque al corazón tienen síntomas previos como dolor, opresión en el pecho, zumbido de oídos, mareos, palpitaciones, sensación de ahogo o sofocación, afirmó.
El dolor en el pecho puede extenderse a la mandíbula, cuello, brazos, muñecas, dedos e incluso sentir pesadez en las extremidades superiores, con más frecuencia en el brazo izquierdo, aseveró.
Explicó que la mayoría de los infartos son causados por un bloqueo de alguna de las arterias, que son los vasos sanguíneos que rodean al órgano y lo abastecen de oxígeno y otros nutrientes.
Sostuvo que el sobrepeso, obesidad, hipertensión, diabetes mellitus, problemas de colesterol, sedentarismo y las prácticas desmesuradas por el consumo de bebidas alcohólicas y el tabaco, son los principales factores que predisponen la enfermedad cardiovascular coronaria.
Por lo cual, destacó que al reducir el consumo de azúcar, nivelar la presión arterial, el colesterol así como modificar hábitos alimenticios, realizar actividad física por lo menos 30 minutos diarios, se puede prevenir o controlar este padecimiento.
Cortés Carrillo, añadió que Oaxaca cuenta con dos Unidades Médicas Especializadas para la Atención, Prevención y Tratamiento de las Enfermedades Crónicas (UNEME-EC), localizadas en la colonia Volcanes y en Juchitán de Zaragoza.
En donde se ofrecen servicios especializados de medicina, nutrición y psicología, así como el apoyo de enfermería, trabajo social y promoción a la salud, las cuales coadyuvan a disminuir la incidencia de esta afección, puntualizó.
Finalmente, recomendó a la población que desde la infancia se establezca una alimentación rica en fibra, frutas y verduras, baja en sal, azúcar y grasas, para evitar afectaciones al corazón.