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CIUDAD DE MÉXICO, 5 de octubre de 2020.- La versión de que el virus SARS-CoV-2, causante del Covid 19, tuvo su origen en un mercado en Wuhan, China y habría sido trasmitido de animales infectados a humanos, es un “cuento de niños” sostiene la periodista Cristina Martín.
Lo que hay detrás del nuevo virus, que hasta septiembre registró 34 millones de casos en el mundo y un millón de defunciones, advierte la comunicadora y escritora es una plandemia diseñada para establecer un nuevo orden mundial sin necesidad de recurrir a una estrategia armamentista.
En entrevista con Quadratín México, por videoconferencia desde España, la autora de betsellers sobre globalización, considera que todas las naciones de manera forzosa deberán pronunciarse por estar en uno de los dos bloques; el que encabeza China en colaboración con la Organización Mundial de la Salud y grandes inversionistas y en el otro extremo el que representa Estados Unidos al mando de Donald Trump.
“Además, el coronavirus es una arma de control social, porque estamos viendo como en todas las naciones se está imponiendo una vigilancia intrusiva, similar al Gran hermano, un laboratorio vivo como lo llaman en Centro de Dinámica Social del Instituto Tecnológico de Massachusetts, que es donde se ha creado la plandemia, porque se trata de un plan oculto que no es actual sino que viene desarrollándose desde principios del siglo veinte en laboratorios de la elite”.
Categórica, Martín ha investigado por más de diez años la intención de una elite totalitaria que busca imponer un nuevo tipo de sociedad y de costumbres en donde los seres humanos se tendrán que relacionar de manera distante con sus familiares, vecinos y demás habitantes.
En su más reciente libro La verdad de la Pandemia, editado en México por Planeta en agosto de esta año, la comunicadora documenta lo que considera el temor de una elite de inversionistas y gobiernos, representados en el Club Bilderberg ante una inminente “rebelión de las masas”.
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