Bloquean vecinos de la Gómez Sandoval por obra inconclusa
JUCHITÁN, Oax. 9 de noviembre de 2015.- Unos mil 500 ciudadanos provenientes de Centroamérica, que ingresan al país sin documentación para llegar a los Estados Unidos, han sido vejados o asaltados en su trayecto a los Estados Unidos a su paso por Oaxaca.
En entrevista, Alberto Donis, coordinador del refugio Hermanos en el caminos, con sede en Ixtepec, dijo que desde el inicio del programa Frontera Sur, hasta octubre de 2015, se han abierto más de 400 legajos de investigación sobre delitos cometidos en contra de migrantes en el tramo Arriaga-Chahuites.
Los grupos delictivos que operan en la zona oriente del Istmo de Tehuantepec contra los centroamericanos cambiaron de zona de asaltos, ahora interceptan a los migrantes en el tramo Chahuites- Ixtepec, informó Alberto Donis.
Debido a los constantes operativos policiacos en el tramo Arriaga- Los Corazones – Chahuites y las medidas cautelares que posee el refugio “Centro de Ayuda Humanitaria” de Chahuites por parte de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, los asaltos en la zona oriente disminuyeron considerablemente en el último mes.
Sin embargo, solo cambiaron de estrategia, ahora salen al paso a los migrantes en parajes de Unión Hidalgo, Juchitán y de Ixtepec a Tierra Blanca, este último tramo se da sobre La Bestia, como sucedió con los dos guatemaltecos asaltados en Chivela , agencia de Ixtaltepec , quienes recibieron machetazos en el cráneo, uno de ellos está en coma en el hospital general “Macedonio Benítez Fuentes” de Juchitán.
Alberto Donis manifestó que lo más preocupante, no sólo es el aumento de asaltos o cambios de estrategias, sino la inercia de la Fiscalía Especializada de Atención del Migrante, que sólo archiva las denuncias, abre legajos de investigaciones, pero nunca actúa, lo que ha traído como consecuencia las incidencias de asaltos, secuestro y violaciones.
En el refugio de Ciudad Ixtepec se encuentran actualmente alrededor de 200 migrantes, de los cuales el 90 % son víctimas de asaltos, por lo que la mayoría espera hasta dos meses en el espacio que fundó el cura Alejandro Solalinde la visa humanitaria que tienen derecho para poder seguir con el proceso de denuncia ante la Fiscalía.
“Muchos esperan en el refugio hasta dos meses a que la justicia los llame, pero también muchos continúan el viaje con su visa porque la Fiscalía no los llama para las diligencias, entonces se van, porque lo que buscan es llegar a la frontera o el norte del país.”, explicó.