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Tareas de Claudia sin AMLO: economía y Casa Blanca
-España el País más desigual de Europa
-Están un brete con su Política Económica
-Claro no se le debe imitar
Oaxaca, Oax. 15 de octubre de 2012 (Quadratín).-Después de conocer los datos de la evolución de la desigualdad en España, la más amplia de la Unión Europea, comprendemos el impacto de malas políticas económicas, que usan slogans para venderse, pero que en la realidad sus objetivos son otras, existiendo incluso modelos para medir el tamaño de la protesta social, pero la realidad no se ajustará nunca a un modelo estadístico. A la calificación que da Standard & Poors a los bonos españoles, a los que califica como bonos basura, se suma el pronóstico del FMI, que de acaba de señalar que 2013 será un año muy difícil para las economías griega y española.
El asunto independentista de Cataluña no es menor, ni las de las universidades públicas. Están en un brete sin duda. Tienen a casi el 22 % de su población en pobreza extrema y ya se observan diferencias regionales en la esperanza de vida. El Estado de Bienestar se ha desmoronado.
Los españoles han sufrido desde la anterior Administración con la primera Reforma Laboral y la del sistema de pensiones, pero más con la última, una serie de políticas económicas de un alto costo social, que han profundizado la pobreza y la desigualdad. Medidas como el incremento de la edad de jubilación, la reducción del gasto y por tanto de las prestaciones de salud, la reducción de los apoyos a la educación, la socialización del costo del rescate de la Caxia como ejemplo, el incremento del desempleo por tanto la no creación de nuevos empleos- a pesar de que se justificaron las reformas recientes con promesas de que habría más empleo, bienestar, esto es lo contrario. El costo político para el Gobierno actual es evidentemente alto. Ya he dado cuenta de los últimos fenómenos, como los aires independentistas de Cataluña, que en el fondo buscan un nuevo Pacto Fiscal y el cambio de forma de Gobierno, para llegar a un Federalismo Descentralizado.
Con datos publicados el El País, del 11 de octubre de este año, el Coeficiente de Gini, indicador útil para medir la desigualdad en la distribución del ingreso, entre los miembros de la Unión Europea, muestra a España con la más alta desigualdad, incluso mayor al promedio regional. Si fuera de 0, estaríamos ante una igualdad total, si pasamos al 100 % la desigualdad sería total. El Coeficiente español es de 34 % en 2011, frente al 30.5 % de la UE 27 y el 30.5 de la UE 15. En 2007 sólo para España fue de 30.7 %, 31.3 en 2008 y 34 % en 2011, siempre arriba de la media europea y lejos, muy lejos del 22. 5 % de Noruega.
En cuanto a la diferencia de ingresos, entre los dos deciles más altos y los dos más bajos, la cifra más alta es también la española: 5.6 % en 2008 y 7.5 % en 2011, mientras en la UE 15, pasó de 5 % en 2008 a 6.2 % en 2011, y la UE 27 de 5.1 % a 5.7 %, por supuesto el dato para Noruega es de 3.3 %.
En la misma edición de El País, Cristina Delgado y Amanda Mars, señalan que nunca en los últimos años la distancia entre unos y otros fue tan grande. Ni la diferencia de ingresos tan amplia. La tasa de paro ha hecho mella en los ingresos de las familias. Más de 1,7 millones de hogares españoles, según la última Encuesta de Población Activa, tiene a todos sus miembros en paro. Y solo el 67% de los registrados en las oficinas de empleo reciben alguna ayuda o prestación del Estado. Como resultado, España ocupa una de las posiciones más preocupantes en las estadísticas que miden la desigualdad social y se ha convertido, por primera vez, en el país de los Veintisiete con mayor distancia entre las rentas altas y las bajas.
Moraleja: no es un Modelo para imitar: ya tenemos indicadores de pobreza y desigualdad mayores, somos la economía según CEPAL, donde se incrementó en mayor medida el número de personas en pobreza extrema y donde la economía informal y el subempleo son fenómenos crecientes.
*Auditor Especial del Gasto Federalizado en la ASF. Ha sido Presidente del Colegio Nacional de Economistas.
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