Día 18. Genaro, víctima de la seguridad nacional de EU
MÉXICO, DF. 17 de febrero de 2014 (Quadratín).- Ya he comentado algunas características de la estructura tributaria de nuestro País, así como indicadores referidos a su recaudación, que la caracterizan, como es el caso de su relación con el Producto Interno Bruto (PIB); su regresividad al descansar en la tributación indirecta; el peso en los ingresos tributarios federales de los ingresos provenientes de los hidrocarburos, cerca de dos quintas partes de la recaudación; la fuerte concentración de potestades tributarias en el orden central, dado el bajo potencial recaudatorio de los ingresos locales; el bajo crecimiento en términos reales de la recaudación federal participable, que mantiene las transferencias en efectivo en sus niveles apenas de antes de la crisis; la debilidad de las finanzas subnacionales de varias entidades federativas y las de los municipios, debido al cambio de fórmulas de distribución de las participaciones de 2008 y al impacto de la crisis de 2009.
Por eso quiero hoy comentar algunos de estos temas en América Latina destacando lo de México.
En el Panorama Fiscal de AL difundido en 2013, se destaca que la relación impuesto/PIB –excluyendo los ingresos de seguridad social- creció para la región del 12.7 por ciento en el año 2 mil a 15.7 por ciento en el 2011, sin incluir al Caribe. Destacaron los incrementos de Argentina y Ecuador y por lo menos de dos puntos del resto, “sin embargo, en el grupo de países con menor carga tributaria, donde se destacan los casos de México y Venezuela, que durante el periodo considerado, experimentaron una reducción de su carga tributaria”.
En cuanto a los países donde la explotación de recursos naturales no renovables, se incrementó su importancia recaudatoria. “Entre 1999 y 2001 y 2009-2011, los ingresos derivados de los productos primarios, “aumentó 7.2 por ciento del PIB en el Ecuador, 7 en Trinidad y Tobago, 4.5 puntos en Bolivia, 3 por ciento en Argentina, 2.9 por ciento en Chile, 2.2 por ciento en Perú y 1.4 puntos porcentuales en México y el Perú”.
Señala que el IVA ha crecido como proporción del PIB, pasando del 5.1 por ciento al 6.7. Ya he comentado como este impuesto en la lago plazo es el que ha crecido más tanto en la OCDE como en nuestra región, donde el incremento de su tasa ha sido casi generalizado desde 1980, que fue cuando empezó a usarse en México, en sustitución del ISIM. Dice el Informe de CEPAL que “sin embargo, ha habido variaciones importantes entre grupos de países y se puede observar una tendencia de mayor fortalecimiento relativo (como proporción del PIB) de los tributos indirectos en el grupo de países de mayor recaudación de AL”.
Es claro que la productividad recaudatoria de este impuesto, es una combinación de tasas y de bases tributarias. Algunos países de la región tienen tasas parecidas al promedio de la OCDE, como Argentina, Brasil, Chile, Perú y Uruguay – 21, 20.5 en promedio, 19, 18 y 22 por ciento respectivamente-. México del 16 por ciento.
Los gastos fiscales, derivados de tratamientos preferenciales, disminuyen la base, destacando Colombia, Costa Rica, Ecuador, México, Nicaragua y Venezuela.
En México, Perú y Venezuela, aumentaron las tasas sin modificaciones en la base imponible, “mientras que (ojo) en la mayor parte de países en que aumentaron las alícuotas, tendió a reducirse de manera selectiva la base imponible mediante el establecimiento de tasas cero o cobros exentos”.
En el caso del ISR, ha pasado en promedio de 3.2 por ciento del PIB en el año 2001, a 4.9 por ciento en 2011 y se mantiene la recaudación “sesgada hacia las personas jurídicas en comparación con las personas físicas, numerosas exenciones y exoneraciones, un nivel de ingresos mínimos exentos elevado y el carácter cedular de este impuesto han reducido –según CEPAL- su recaudación y equidad”. En los últimos años se han incrementado las tasas y la base, como en México, donde de 2000 a 2006 se redujeron tasas.
Finalmente se han usado medidas como el acotamiento de los gastos deducibles, controles modestos a los precios de transferencia y la reducción de exenciones para incrementar la recaudación. Continuará…
*Ha sido Presidente del Colegio Nacional de Economistas.