
Déjate las drogas… ¡aguas con las gusgueras!
HACIA UNA ESPAÑA FEDERAL
-La crisis del centralismo
-Es la economía, como siempre
-Un federalismo moderno, no centralista
Oaxaca, Oax. 24 de septiembre de 2012 (Quadratín).-Las repercusiones de la masiva movilización ciudadana por la independencia de Cataluña han dominado los espacios políticos de ese País, mereciendo incluso comentarios en el seno de la Unión Europea, que hablan de lo costoso que sería para España y Cataluña una acción de esa naturaleza.
En la semana se ha dado un encuentro entre el Presidente de la Generalitat y el Presidente de España, donde este último ha rechazado el nuevo Pacto Fiscal, aunque no se cerró a la discusión del mismo y abrió la discusión. Sin embargo ha emergido como el Tema, lo referente al Pacto que demanda el Gobierno de Cataluña, que consiste en que se les entregue la potestad de los impuestos generales y la Agencia Tributaria, esto es la administración impositiva y la soberanía fiscal.
Es evidente que el Pacto que nace al igual que en México en 1978, también está agotado. El mismo impulsaba un modelo social basado en la política de bienestar y un cierto grado de descentralización acotado por la naturaleza del Estado Unitario. Sin embargo, al igual que el mexicano, el Pacto Fiscal español se agotó, la crisis económica lo evidencia y en consecuencia, se tienen que cambiar las relaciones intergubernamentales y las reglas del juego del reparto de los recursos y las responsabilidades de gasto. Es evidente que han sido maltratadas fiscalmente las Comunidades y lo de Cataluña es una reacción natural. Para variar es la Economía.
Desde mi punto de vista, la única salida política viable, es la de transformarse en un Estado federal, y revisar sus relaciones con las Autonomías desde la ventana del federalismo fiscal, con un reparto adecuado y suficiente de las facultades tributarias, creando mecanismos de compensación para las Autonomías de menor nivel de desarrollo, a través de las transferencias que complementen las haciendas públicas de las entidades de menores ingresos y más débiles estructuras productivas. Un federalismo cooperativo y solidario, en la distribución de las potestades impositivas. Pueden aprender del Federalismo Alemán.
Los países más grandes y las economías más fuertes del Mundo corresponden a países federales como Estados Unido, Canadá, Rusia, Alemania, India o Brasil y México, con un grado importante de descentralización de las facultades tributarias que no es el caso mexicano- como podemos observarlo en las estadísticas de la OCDE, el CIAT y el FMI. Por el contrario las tendencias separatistas se dan más en países unitarios como España, sobre todo cuando hay crisis fiscal y económica. Ayer mismo El País informa que en 2013 el pago por intereses de la deuda pública superará al de servicios personales: será de 38 mil millones de euros, 9 114 millones más que en 2012, mientras que los de personal apenas rebasan lo 33 mil millones.
El Modelo Federal es la salida y las ideas separatistas se mantendrán mientras no haya un nuevo Pacto Fiscal y no cambie la distribución de las facultades tributarias y no cuenten con un espacio de concertación institucional a nivel de pares. Por ejemplo este jueves el Parlamento Catalán se pronunciará al respecto. Lo de En lo fiscal deben tener claro que primero tienen que definir el reparto de las fuentes tributarias, entre las propias Autonomías y el Gobierno Central. Después definir y mantener dos principios básicos para el reparto entre ellas: el resarcitorio, esto es aquellas donde se genera la recaudación, no sean castigadas y aprovechar las transferencias para fortalecer o compensar las diferencias en los niveles de riqueza e ingreso de las comunidades y los ciudadanos menos favorecidos.
En suma, que España necesita ser una Nación Federal.
*Auditor Especial del Gasto Federalizado en la ASF. Ha sido Presidente del Colegio Nacional de Economistas.
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