David Colmenares/ Signos y señales/ ¡Alerta municipios!

Oaxaca, Oax., 5 de septiembre de 2011 (Quadratín).-
-Invariablemente desdeñados
-Deben aparecer en la discusión
Las finanzas municipales enfrentan desafíos mayúsculos, que van desde su dependencia de las transferencias estatales y federales de recursos, hasta su fragilidad frente a las acciones de los congresos locales o las decisiones de los ejecutivos estatales y federales.
Los Municipios son observadores pasivos de decisiones que les impactan sin tener la posibilidad de evitarlo, como en el caso de la desaparición de la tenencia o la coordinación estatal en derechos.
Los cerca de 2 439 municipios apenas reciben el 5 por ciento (%) de la recaudación participable, correspondiendo a los estados un raquítico 17 % y las otras cuatro quintas partes el Gobierno Federal, que además no participa a estados y municipios de todos los ingresos corrientes.
En algunos estados –cada vez menos- los municipios han sido víctimas de prácticas perversas por parte de los gobiernos estatales, quienes no les pagan el total, ni a tiempo de sus participaciones. Recordemos la famosa controversia de Acapulco y las penurias del Municipio de Oaxaca cuando Gabino Cué era Presidente Municipal. Además no tienen la facultad de Iniciativa Fiscal.
La Ley de Coordinación Fiscal (LCF) señala que por lo menos se les debe pagar el 20 % de las participaciones que reciben los estados. En 12 de ellos se les paga más, destacando Hidalgo con 25 %, pero sólo en el Fono General. Tabasco les paga el 22%. Estos incrementos se han dado cuando surge la figura de Gobierno dividido, esto es que un partido distinto al que tiene el poder en el Ejecutivo, es mayoría en el Congreso Local. Al no estar normados mecanismos como la “mezcla de recursos” – pari passus-, el ejercicio de la discrecionalidad es impresionante, como sucedió en Oaxaca en los últimos sexenios: “si eres cuate pon el 10 %, sino el 50 %”. Esto ha sucedido en otros estados.
Veamos el caso de la Tenencia Federal condenada a muerte a partir del primer día de 2012, que muchos gobernadores afirmaron desaparecerían, aunque la mayoría le ha dado la vuelta, sustituyéndola por un impuesto local con características similares.
El costo de desaparecer la tenencia federal afectaría a las finanzas municipales en casi cinco mil millones por año. Por ejemplo la recaudación en EDOMEX es cercana a los 2 500 millones anuales, un cálculo simple habla de 12 500 en seis años, y se olvida que por lo menos el 20 % de lo recaudado, corresponde a los municipios. Lo cual significa que los Municipios del EDOMEX dejarían de recibir más de 2 500 en el sexenio.
Entre paréntesis, el caso el DF dejaría de recibir alrededor de seis mil millones de pesos por año, esto es más de 30 mil millones en los próximos seis años. Se dice que Ebrard no lo quiere para el DF, pero al final lo más conveniente será asumirlo como impuesto propio, aun con una base disminuida: rectificar después o más deuda no son opciones. En Veracruz se había dicho que no sustituirían el Impuesto (Decreto 838), ya lo rectificaron y adicionaron el impuesto estatal para no perder los recursos recaudados que en 2010 fueron de 872 millones. Recuperarán más de la mitad, por una base disminuida por los subsidios fiscales.
Muy grave es el caso del Fondo de Fomento Municipal, esto es el 1% de la recaudación participable, cuyo 83.2 % está condicionado a la coordinación estatal en derechos. Esto significa que si el Estado decide descoordinarse, sus municipios pierden cuatro quintas partes de dicho Fondo. Esto es un asunto controvertible, cuya posibilidad deben analizar las asociaciones de presidentes municipales.
El mundo de los economistas
El miércoles en el DF se llevará a cabo el Segundo Foro Nacional “Hacia un Nuevo Proyecto Nacional de Desarrollo organizado por el Colegio Nacional de Economistas y el viernes a las
18:30 horas, toma posesión el nuevo Consejo Directivo del Colegio de Economistas de Oaxaca que encabezará José María Villalobos Rodríguez, estupenda selección por cierto.
*Consultor en temas de Hacienda Pública y Coordinación Fiscal. Ha sido Presidente del Colegio Nacional de Economistas.
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