Fiscalía de Oaxaca despliega a más de 120 agentes en la Central de Abasto
Oaxaca, Oax. 3 de diciembre de 2012 (Quadratín).-Jaime Galván Rodríguez, quien fuera testigo protegido del caso Ayotzinapa, Guerrero, es originario del estado de Oaxaca y su cuerpo fue reclamado por dos de sus sobrinas, que se negaron a proporcionar la comunidad de procedencia, para evitar problemas.
De acuerdo con versiones periodísticas en Chilpancingo, el fin de semana fue entregado el cadáver a Eusebia y Gabriela Dionisio Muñoz, quienes lo trajeron a esta entidad.
Galván Rodríguez era testigo protegido de la Procuraduría de Justicia estatal, al ser el único que afirmó que fueron elementos de la Policía Federal quienes dispararon en contra de los estudiantes de la Escuela Normal de Ayotzipana, en los hechos ocurridos el 12 de diciembre de hace un año.
El 10 de septiembre pasado, su concubina Margarita Arcos lo reportó como desaparecido; el 23 de octubre la mujer fue arraigada acusada de la desaparición de Galván y ésta declaró que mandó a matarlo porque la maltrataba demasiado, por cuyo encargo pagó 30 mil pesos.
El cuerpo en proceso de descomposición del oaxaqueño apareció el 8 de septiembre en la carretera de Chilpancingo a la comunidad de Amojileca, y presuntamente tenía huellas de tortura.
En los sucesos violentos ocurridos en la Autopista del Sol, fallecieron a balazos los estudiantes Alexis Herrera Pino y Gabriel Echeverría de Jesús, además de que se generó un incendio que también mató a Gonzalo Rivas Cámara, empleado de la gasolinera Eva II.
Foto: Ambientación