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Oaxaca, Oax. 21 de septiembre de 2012 (Quadratín).-A su corta edad, Diego Mendoza Martínez es una muestra de lo que puede lograrse a través de una labor educativa conjunta entre padres y maestros. Inscrito desde los cuatro meses en el programa NyNEC (Niñas y Niños Educándose en Comunidad), de la escuela primaria Policarpo T. Sánchez, el pequeño ya empieza a leer, identifica doce colores, todas las partes de su cuerpo, los nombres de instrumentos musicales y los sonidos que emiten distintos animales.
Desde los cuatro meses, Diego asiste con sus padres al programa NyNEC: una hora diaria de estimulación temprana escolarizada y actividades de reforzamiento en casa. A un año y once meses de edad, el pequeño ha empezado a leer. ¿Cómo lo hace?
Sus padres, María Mendoza y Heriberto Martínez, contadores públicos de profesión, muestran al niño las imágenes de unas uvas, un elefante, un oso, un avión; el pequeño pronuncia, con dificultad aún, el nombre de cada imagen y busca entre varios letreros el que corresponde a cada una de ellas. Acabando el ejercicio sus padres le aplauden, y él mismo se aplaude y grita ¡Bravo!.
El profesor Antonio González Elvira, asesor en la educación del pequeño señala: Con Diego trabajamos con el Método Philadelphia, creado por el educador norteamericano Glenn Doman, experto en desarrollo infantil y estimulación temprana. Doman diseñó este método para enseñar a leer a niños con parálisis cerebral pero se ha visto que funciona perfectamente para todos los niños. Se aplica en España, en México y en otros países.
Considera que a este paso, a los tres o cuatro años Diego estará hablando y leyendo con fluidez, como la ha hecho ya Kimberly, otra alumna del programa NyNEC en la misma escuela, que lee desde los cuatro años y que ahora, a los seis años, bien podría cursar el segundo grado de primaria, aunque se encuentra en primero.
¿Cómo es Diego en su vida cotidiana, en casa?, se pregunta a su madre. Tiene muchos juegos didácticos, libros, rompecabezas, y ve programas de televisión de animales, de música le encantan las bandas de música-, de danza, y también le gusta Micky Mouse; él elige sus programas, no se los imponemos, comenta.
Doña María Martínez indica que su embarazo fue de alto riesgo. La primera vez que el ginecólogo observó a Diego en el ultrasonido dijo que era un niño muy listo porque cuando lo quería observar de frente se volteaba para otro lado.
A su vez, Heriberto Mendoza comenta que su hijo es muy juguetón, observador, un poco desesperado porque todo quiere hacerlo rápido, muy sociable, y no es caprichoso. Siempre se aplaude, canta y baila cuando algo le gusta mucho. Duerme doce horas corridas.
Agrega que para educar a un hijo es necesario dedicarle tiempo y no subestimarlo porque está pequeño. También es conveniente darle seguridad dejándolo que se vista y coma por sus propios medios y sólo ayudarlo si es necesario.
La directora de la escuela Policarpo T. Sánchez, Graciela Hernández Rivera, comenta que en este plantel se hace realidad el modelo educativo de Lev Semionovich Vygotsky que integra escuela, familia y comunidad. De esta forma, asegura, es posible lograr niños más desarrollados tanto física como emocional e intelectualmente.
La profesora, con más de 50 años de experiencia, explica que el programa NyNEC, en el que se encuentran inscritos como Diego, 200 alumnos de cero a seis años, fue establecido hace ocho años en el plantel situado en la Colonia Moctezuma de la agencia municipal de San Martín Mexicapan, con la asesoría de un grupo de expertos cubanos.
De acuerdo con el modelo cubano, la educación empieza a los cero años y deben ser copartícipes del proceso enseñanza-aprendizaje tanto padres como maestros. Las sesiones se llevan a cabo por las tardes, y es indispensable la asistencia de padre y madre, o por lo menos de uno de ellos.
De acuerdo con fuentes de información en internet, el Método Philadelphia de Glenn Doman se aplica en los Institutos para el Desarrollo del Potencial Humano, fundados por su creador con el propósito de lograr la excelencia física, social e intelectual y desarrollar al máximo las capacidades de los niños en estos aspectos.