Economía en sentido contrario: Banamex
Indicador Político
MÉXICO, DF, 6 de octubre de 2015.- Cuando Vicente Fox ganó la presidencia y comenzó a enfrentarse a la estructura de poder, su primer error fue prometer el cielo desde el centro del infierno. La crisis de expectativas lo atropelló el primer año y prefirió disfrutar el poder a cumplir con las tareas comprometidas con la sociedad.
No es por echarle a perder ese disfrute del poder a Jaime Rodríguez El Bronco, pero su conocimiento práctico de la realidad le ayudó a mover los resortes de las expectativas sociales, aunque su tarea fundamental carece de retórica: la instauración de un nuevo sistema político local.
Ante una sociedad harta del ahora exgobernador Rodrigo Medina, las promesas son lo menos caro de la política. Como microcosmos del sistema político priísta nacional, el subsistema de Nuevo León reproduce sus limitaciones y sus contradicciones: los gobiernos se conducen vía reglas y no por facultades extraordinarias.
El primer problema de El Bronco será político. Su llegada al gobierno de Nuevo León fue, si bien se entienden los mensajes que ha sembrando en estas semanas, un peldaño de su objetivo final: la Presidencia de la República. Como Fox, El Bronco le dedicará más tiempo a la grilla sucesoria nacional que a los problemas estatales.
Los tiempos políticos serán cortos. El sexenio local de El Bronco comenzó el 3 de octubre de 2015 y concluirá el 3 de octubre de 2021. Como están de adelantadas las fiebres sucesorias, las precampañas ya comenzaron. En los hechos, la lucha por la candidatura presidencial del PRI va a comenzar a marcar los ritmos políticos al comenzar el 2017; por tanto, El Bronco tendrá que abandonar la gubernatura a finales de 2016. Es decir, gobernará Nuevo León sólo quince meses, el trimestre que queda de 2015 y todo 2016.
Pero a pesar de que lo fuerte de la sucesión estará en el 2017, cualquier candidato independiente que carezca de estructura electoral en un sistema dominado por las estructuras electorales tendrá que invertir recursos y tiempo en construir su aparato electoral. ¿De dónde saldrá el dinero y cuándo comenzará a descuidar la gubernatura?
La razón cínica de la política a la mexicana tiene claro que la corrupción, como lo descubrió Alan Riding como corresponsal del The New York Times y lo escribió en su libro Vecinos Distantes, es una amalgama de cohesión del sistema político; las denuncias contra el gobernador Medina fueron en el sentido de que acaparaba toda la corrupción y su padre se quedaba con la mejor parte. En Tabasco, el gobernador perredista Arturo Núñez metió al exgobernador Andrés Granier a la cárcel pero la corrupción sigue amalgamando el sistema tabasqueño.
El problema real de los estados no es la corrupción sino la seguridad, el nivel de bienestar y el empleo.
El Bronco tendrá apenas medio año para mostrar sus cartas presidenciales y ya sin la posibilidad del fraseo de ranchero que dice nada a la realidad de la crisis. Las expectativas sobre su gestión son más altas que sus posibilidades de gobierno. Su punto central será el encarcelamiento del exgobernador Medina y su padre, pero el PRI no le facilitará la tarea. Y si Medina no pisa la cárcel en seis meses, la crisis de expectativas será mayor.
Gobernar para la candidatura presidencial y no para los neoleoneses sería la gran derrota política de El Bronco.
Sólo para sus ojos:
Los primeros problemas con el gobierno de El Bronco serán sus alianzas políticas: hay indicios de la mano del exgobernador coahuilense Humberto Moreira.
Otro problema con El Bronco será su papel de promotor de independientes. Noé Garza Flores, del grupo de Humberto Moreira, podría ser el independiente a la gubernatura de Coahuila contra el candidato de su hermano Rubén Moreira. Kramer vs. Kramer con boletos pagados por El Bronco.
La candidatura de López Obrador ya tiene competidores: un independiente vinculado al gobierno peñista, Miguel Ángel Mancera, Margarita Zavala y Graco Ramírez. Pocos votantes independientes para tantos candidatos.
Irritación contra Denise Dresser de padres de familia con familiares enfermos de autismo por la frivolidad en el uso de ese padecimiento para ofender a Peña Nieto. Usa el concepto de autismo como insulto.
http://indicadorpolitico.mx
@carlosramirezh