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Oaxaca, Oax. 8 de julio de 2010 (Quadratín).- El ex consejero electoral del Instituto Federal Electoral (IFE), Mario Hernández Martínez consideró que lo que se vivió el domingo 4 de julio fue una revolución pacífica que mostró el hartazgo de los ciudadanos sin partido por este gobierno.
En entrevista con Quadratín, el también catedrático de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la UABJO, mencionó que este año 2010 fue histórico porque justificó la democracia, donde constitucionalmente es aceptada la alternancia. Si hay partidos debe haber alternancia y no, como una en monarquía, que sea uno sólo el que gobierne, expresó.
Refirió que por 80 años en Oaxaca había desgobernado el PRI, y los movimientos de inconformidad contra el mal manejo priista se habían dado desde 1975-1977. Y el movimiento de 2006, dijo, no sólo lastimó al magisterio, sino al pueblo en general.
Entonces, agregó, el 4 de julio el pueblo vio una oportunidad de liberar esa ira contenida y manifestar su hartazgo en contra del PRI y de Ulises Ruiz, el actual gobernador. En 2006, consideró, se mostró en las urnas una inconformidad latente y un justo enojo del pueblo.
Destacó que la participación de la sociedad, independiente del voto duro que hayan tenido los partidos coaligados, es la que llevó a que en estas elecciones concurrentes se diera la alternancia, fue la ansiedad de un pueblo, ciudadanos, que están desorganizados y que no tenían voz.
La ciudadanía sin partido se expresó, fue una revolución ciudadana pacífica, la ciudadanía libre, mayoritariamente sin partido, fue la voz del pueblo, la voz de Dios, que dijo hasta aquí al PRI, hasta aquí a Ulises Ruiz.
Hernández Martínez situó ese contexto como histórico y lo que hace esa revolución pacífica. Las elecciones son una manera de mostrar inconformidad, estas votaciones fueron históricas, a pesar del voto duro, fue la ciudadanía sin partido la que hizo una revolución pacífica.
El reto para la coalición que ganó, dijo, será manifetar en los hechos el cambio en la forma de gobernar y que el ciudadano siga creyendo por la opción que votó; el nuevo gobierno debre hacer consultas públicas y no repetir los vicios de los priistas.
Gabino, opinó, llega con una mentalidad reeducada después de recorrer el estado y sus colaboradores deben estar en esa misma tesitura; y el nuevo gabinete debe ser responsable, vigilar el proceso de entrega recepción y responder al voto, que hizo posible que se rompiera el mito de que el PRI siempre gana.