Bloquean vecinos de la Gómez Sandoval por obra inconclusa
Oaxaca, Oax. 30 de julio de 2010 (Quadratín).- Al despedir con una misa el cuerpo del presbítero, Carlos Salvador Wootto, el arzobispo de Antequera, José Luis Chávez Botello exhortó a los diversos sectores de la sociedad en realizar una revisión seria de sus comportamientos, luego del crimen que calificó abominable.
Desde el pupitre de la iglesia de Nuestra Señora de las Nieves, el jerarca de la iglesia católica, dio el perdón a los responsables de este hecho, y recordó que el mal no se doblega con otro mal mayor, sólo se vence desde la raíz con el bien.
Les dijo a los responsables del crimen ocurrido el 28 de este mes, que la iglesia diocesana ora por ellos a fin de que no sigan haciendo el mal.
Oramos por todos los que están dañando la vida para que se enderezcan y ya no sigan haciendo el mal, dijo.
Como iglesia perdonamos pero pedimos el arrepentimiento y la conversión del corazón, abundó en compañía de los párrocos de la diócesis de Antequera y quienes acompañaron la ceremonia litúrgica y el despido del cuerpo.
Habló de la misión del párroco y ante este hecho convocó a los sacerdotes en estar unidos a Cristo, con fortalezca y ejercer los actos litúrgicos en cada una de las parroquias por el alma del asesinado.
Pidió que aun en el dolor del alma no deben de alimentar el enfrentamiento, ni divisiones, por eso nadie menos en el hogar deben alimentar la venganza
El cuerpo será incinerado para que después inicie el novenario que culminará el 8 de agosto.