Francisco Toledo diseñó los gatos que albergará la Biblioteca Carlos Monsiváis

Oaxaca, Oax. 10 de octubre de 2012 (Quadratín).-Era conocida la afición de Carlos Monsivás por los gatos y eran muy creativos los nombres que daba a sus mascotas: Miau Tse Tung, Eva siva, Fray Gatolomé de las bardas, Mito genial, Caso omiso, Voto de castidad, Copelas o maullas y Miss oginia, entre otros.
Inspirado en los felinos que tanto gustaban al escritor fallecido en 2010, el artista plástico Francisco Toledo diseñó una serie de mosaicos que en conjunto formarán un tapete dentro de la Biblioteca Carlos Monsiváis, situada en el interior de la Biblioteca de México José Vasconcelos, en el Distrito Federal.
Así lo dio a conocer Javier García García, propietario del taller Arte y Decoración donde se fabricaron los mosaicos con los diseños de artista oaxaqueño, realizados uno por uno de forma artesanal, y que, informó, fueron embarcados recientemente de la ciudad de Oaxaca al Distrito Federal, para su colocación en un tapete de 128 metros cuadrados.
El artesano, quien ha realizado diseños de otros artistas como José Castro Leñero, Guillermo Olguín y Jan Hendrix, comentó que para lograr el acabado propuesto por el maestro Toledo fue necesario innovar la técnica tradicional bajo las indicaciones del artista. Los mosaicos, recalcó, tienen una duración de aproximadamente cien años.
La biblioteca de Monsi, como le decían sus amigos, fue adquirida a principios de 2012 por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta); de acuerdo con información de su titular, Consuelo Sáizar, el acervo cuenta con más de 24 mil volúmenes por los cuales el gobierno federal pagó 13 millones de pesos.
La remodelación del espacio que ocuparán los miles de volúmenes de poesía, narrativa, ensayo, cuento, teatro, arte y fotografía, así como colecciones de revistas, corre a cargo del arquitecto Javier Sánchez, quien ha declarado que el principio del diseño es el de rememorar cómo Monsiváis tenía su biblioteca en su casa “con una especie de orden desordenado”.
Se espera que la Biblioteca Carlos Monsiváis pueda ser abierta al público antes de que termine este año.