Diferencias entre un estúpido y un idiota
Oaxaca, Oax. 16 de julio de 2009 (Quadratín).-La guerra contra el crimen organizado tomó un rumbo indeterminado y peligroso en el que los papeles se invirtieron y ahora es la policía la que tiene que esconderse frente a la respuesta violenta del cártel de La Familia en el estado de Michoacán.
Fuentes confiables indicaron que los elementos de la Policía Federal Preventiva fueron concentrados en sus cuarteles hasta nueva orden luego de la ola de atentados, emboscadas y ataques directos en contra de esa corporación en al menos 5 entidades de la república mexicana.
Las medidas no son exageradas, tan solo en lo que va del mandato del presidente Calderón más de mil policías han sido asesinados en nuestro país, 10 de ellos en el estado de Oaxaca.
En el caso de nuestra entidad, las víctimas en esta nueva etapa de la lucha contra el narcotráfico, en su mayoría son elementos de la Policía Estatal Preventiva y aun cuando la corporación mantiene en alto la mora, el valor y el espíritu de servicio la carga de responsabilidades es desigual y como siempre ocurre, los que menos tienen son los que más se exponen.
Desde hace muchos años, la Procuraduría General de la Republica abandonó la plaza y no hay resultados visibles de las investigaciones que se supone están obligados a realizar, por el contrario, en las calles de la ciudad existen versiones de que los elementos de la AFI fueron desplazados y ahora son representantes del crimen organizado los que pasan a cobrar las cuotas de protección a los vendedores de discos piratas.
Por otro lado, la Agencia Estatal de Investigaciones se encuentra dividida y con resultados casi miserables; la mayor parte de las detenciones se relacionan con rateritos, cadeneros, golpeadores, estafadores o conflictos familiares, pero al parecer no se atreven a enfrentar en serio a las bandas de roba-carros, polleros o vendedores de droga.
Mientras que la Agencia Federal de Investigaciones y la Agencia Estatal de Investigaciones se entretienen en el cambio de nombre y funciones y esconden su falta de resultados en el desorden administrativo, en las calles del país los grupos criminales diversifican sus acciones.
En cada entidad del país, según el cártel dominante, sus gatilleros son los responsables del narcomenudeo y los secuestros, pero ahora también el control del comercio informal, el tráfico de indocumentados, la protección de los giros negros y hasta la venta de supuesta seguridad a los empresarios establecidos formalmente.
De esta manera, sin la ayuda de todas las corporaciones obligadas, la Policía Federal Preventiva y la Policía Estatal Preventiva están solas contra el crimen organizado. Y en el caso particular de Oaxaca los policías preventivos también son utilizados para evitar que nuestros paisanos se maten unos a otros por conflictos alimentados la avaricia o, la ingenuidad la perversidad o la torpeza.