
Bloquean vecinos de la Gómez Sandoval por obra inconclusa
Oaxaca, Oax. 29 de octubre de 2012 (Quadratín).-En lo que va del año, se han inmovilizado cerca de 85 bombas en gasolineras oaxaqueñas por diversos motivos, además de haberse recibido tres denuncias de tres gasolineras que alteran la marcación de sus litros en el estado, revelaron las delegaciones de la Profeco y la secretaría de economía federal en el estado.
Ante la medida, el delegado estatal de la Procuraduría Federal de Protección al Consumidor, Pedro Peña Guzmán, dijo que con la nueva normatividad a entrar en vigencia este viernes 26 de octubre, la dependencia federal en coordinación con la secretaría de economía podrán verificar que las cerca de mil 500 bombas no estén alteradas y que su software no envié instrucciones para entregar menos combustible del que se paga.
Lo anterior dará la facultad a la Profeco para multar o clausurar a aquellas Estaciones de Servicio que no cumplan con lo establecido en las normas 005 y 185.
Por su parte, la secretaría de economía federal y empresarios gasolineros de Oaxaca pondrán en marcha la Norma Oficial Mexicana (NOM) 005 y 185, para evitar fraudes en la entrega de litros exactos de gasolina, diesel, premium y magna.
Así, el delegado de la SE en Oaxaca, Joaquín Morales Noyola, adelantó que será a partir de este viernes cuando comenzarán a ejecutarse las nuevas normas para que en los dispensarios, las bombas de combustible se instalen tecnologías que den mayor seguridad al usuario.
Las nuevas tecnologías que serán instaladas refieren a que con el nuevo software las bombas no solamente van a ser modernas, sino que además el software no puede alterarse, indicó Morales Noyola.
Con esta medida, manifestó que la meta son cerca de mil 500 dispensarios o bombas en las 198 Estaciones de Servicio ubicadas en el estado.
Además que mil 400 bombas de gasolina serán actualizadas y otras 100 más serían remplazadas con un software que impedirá la alteración en la venta de combustible, detalló.
Con la entrada en vigor, la norma oficial mexicana 185 se hace obligatoria la instalación de un software de dispensarios de combustible.
Detalló que la actualización tiene un costo aproximado de 6 mil pesos por bomba y la reposición va entre los 8 y 14 mil pesos, con esta acción tendrá un costo de mil 540 millones de pesos para el sector gasolinero, sin embargo, generará un impacto positivo por tres mil 111 millones de pesos, en cinco años que establece el marco jurídico.
Foto: Ambientación