Recomienda IMSS a adultos mayores no excederse en consumo de grasas

Oaxaca, Oax. 31 de diciembre de 2012 (Quadratín).-La alimentación durante la tercera edad no debe ser sustancialmente diferente a la de los adultos, siempre y cuando la alimentación haya sido correcta durante su vida, afirman nutriólogos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Oaxaca, al tiempo que recomiendan que en esta época de fin de año el abuso en el consumo de grasa puede originar enfermedades del corazón e hipercolesterolemia.
Uno de los factores que influyen en la alimentación, son: las alteraciones físicas y mentales que disminuyen la capacidad para manipular utensilios y preparar sus alimentos; falta de saliva y mala dentadura, así como disminución de la capacidad gástrica y digestiva, además de una depresión por aislamiento y pérdida de seres queridos e inapetencia y olvido de comer.
De acuerdo con la coordinadora de Nutrición del HGZ 1, Rocío Espinosa Castro, el envejecimiento es un proceso de cambio físico y mental ligado generalmente al paso del tiempo. Se inicia, dijo, alrededor de los 60 años y, dependiendo de las circunstancias de salud y formas de vida, se presentan algunas características como el pesar menos o más de lo recomendable.
También el organismo tiene menos agua y menos proteínas, aumenta el contenido de grasa, pérdida de calcio y menor capacidad física, así como mayor propensión a contraer enfermedades como diabetes, hipertensión, cáncer, obesidad, problemas del riñón e hipercolesterolemia.
En ese sentido, dice Espinosa Castro, el secreto para mantenerse en buenas condiciones de salud y nutrición es que la alimentación diaria debe proporcionar los nutrimentos que necesita como las proteínas, las vitaminas, minerales y fibra para ayudar al organismo a mantenerse sano.
Finalmente, la especialista en nutrición, recomendó el plato del bien comer, el cual orienta a las personas para que su alimentación sea la correcta, es decir, que incluyan diariamente en el desayuno, comida y cena por lo menos un alimento de cada grupo: verduras y frutas; cereales y tubérculos; alimentos de origen animal y leguminosas como el frijol.
Foto: Ambientación