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Fundamental fortalecer el civismo y la convivencia pacífica: Segob
Oaxaca, Oax. 14 de octubre de 2012 (Quadratín).- La reforma energética que promueve el presidente electo Enrique Peña Nieto en el extranjero únicamente responde a intereses de los grandes capitales privados por participar en la renta petrolera de los mexicanos, acusó el senador de la república, Benjamín Robles Montoya.
El legislador del Partido de la Revolución Democrática (PRD) señaló que: El interés de estos grandes capitales, para forzar la apertura de Petróleos Mexicanos (Pemex) mediante reformas constitucionales, tiene como origen la gran rentabilidad y la amplia generación de divisas que genera la paraestatal; recursos que dejaría de recibir el Gobierno Federal y con ello los beneficios para los mexicanos serían menores, debido a que Pemex es el mayor contribuyente fiscal de México y cada año sus aportaciones representan una tercera parte del presupuesto total de la Federación.
El senador por Oaxaca fundamentó sus declaraciones en las propias cifras de Pemex (plasmadas en el informe que presentó a la Bolsa Mexicana de Valores denominado Reporte anual que se presenta de acuerdo con las disposiciones de carácter general aplicables a las emisoras de valores y otros participantes del mercado para el año terminado el 31 de diciembre de 2011), que indica que en 2011 los ingresos totales de Pemex fueron los mayores de su historia: 1 billón 558 mil 400 millones de pesos, presentando un incremento de 21.6% con respecto a las ventas totales de 2010 de 1 billón 282 mil 100 millones. Y tan sólo en lo que va del sexenio actual, Pemex ha obtenido ingresos por alrededor de 6 billones 500 mil millones de pesos.
Dijo que desde el punto de vista de rentabilidad Pemex se ubica como una de las empresas petroleras con los costos de exploración y producción más competitivos de la industria a nivel global, esto de acuerdo con la información que la propia paraestatal entrega periódicamente a la Securities and Exchange Commission (SEC) del Gobierno de los Estados Unidos.
Detalló que los costos de producción de Pemex se ubican alrededor de 6.12 dólares por barril por abajo de algunas de las mayores compañías a nivel mundial como son: Total (6.57 dólares), la estatal noruega Statoil (7.19), Exxon (9.45), Conoco (9.70), British Petroleum (10.08), la italiana Eni (10.86), Shell (11.0), Petrobras (12.89) y la estadunidense Chevron (13.98 dólares por barril).
Mientras que los costos de exploración y desarrollo de Pemex, indicó, se ubican en 16.13 dólares por barril, contra 18.71 dólares de Eni, Chevron 21.47 dólares y Statoil con 27.99 dólares por barril. En conclusión, puntualizó, Pemex produce un barril muy barato y lo vende con amplio margen de ganancia.
Asimismo, mencionó que una de las pocas maneras en que hoy en día se podría prescindir de tan importantes recursos sería sustituirlos mediante la eliminación del Presupuesto de Gasto Fiscal a los grandes corporativos privados, cosa que obviamente la próxima administración no hará, ya que el financiamiento ilícito que esos grandes corporativos le metieron a la campaña del hoy Presidente Electo fue, entre otras cosas, a cambio de conservar sus privilegios fiscales.
Robles Montoya reconoció que urgen medidas que permitan disminuir la dependencia que tributariamente tenemos de los ingresos petroleros, asimismo es de suma importancia aligerar la carga fiscal que soporta Pemex, con el propósito de tener recursos suficientes que permitan ampliar y renovar se infraestructura, principalmente en materia de refinación, la falta de infraestructura para refinar los petrolíferos que consume el mercado nacional, particularmente las gasolinas automotrices, que le ha costado al país 112 mil 569.2 millones de dólares, además de una cantidad superior a 511 mil millones de pesos en subsidios durante el actual gobierno.
Y es que, señaló que, con base en informes oficiales, el actual Gobierno Federal gastó 53% de los ingresos por exportaciones petroleras en la compra de un volumen cada vez mayor de combustibles automotrices, que alcanzó su máximo nivel histórico en octubre del año pasado. Sin embargo, a pesar de la creciente dependencia de la importación de gasolinas y otros combustibles, el actual gobierno nada hizo para corregir esta lamentable situación.
Desde esta tribuna le señalamos al equipo del Presidente Electo que no permitiremos que el capital privado se adueñe de los grandes beneficios que reporta Pemex a México, e igualmente señalamos que estamos de acuerdo en buscar los mecanismos que permitan disminuir la dependencia tributaria que se tiene del ingreso petrolero y que en el mismo sentido, trabajaremos para que los ahorros que genere PEMEX, al aligerar sus obligaciones, deberán destinarse a mejorar su infraestructura, lo que deberá en consecuencia brindar precios más competitivos tanto para la población en general como al aparato productivo del país, asentó el congresista oaxaqueño.